elyex

Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta

Verstappen se vuelve a equivocar y ahora se enreda con Massa

“En primer lugar, dije tras la carrera, cuando (Verstappen) no estaba aún sancionado: “Creo que tiene que ser penalizado porque lo que hizo estuvo mal”. Así que eso es lo que dije. Cuando es tu primer año, con 17 años,  haces algo así y no eres sancionado, es completamente erróneo. Creo que la FIA tiene que ser fuerte de una manera adecuada, que es lo que hicieron en realidad, eso es lo único que he dicho y no voy a cambiar de opinión. Tenemos que seguir las reglas. Dije que lo que hizo estuvo mal”. Así respondía Felipe Massa en la rueda de prensa del Gran Premio de Canadá al ser preguntado por el accidente de Max Verstappen con Romain Grosjean en Mónaco.

A continuación, le tocó el turno a Verstappen, que no se cortó al lanzar un dardo directo al brasileño: “Cada uno tiene su opinión. Yo frené en el mismo punto. Tengo mi sanción, pero ahora estoy centrado en Canadá. La vuelta en la que me estrellé la frenada fue exactamente la misma que en la vuelta anterior. Quizás  tengas que ver la carrera de Canadá del año pasado y ver que pasó…..”.

Pero el holandés se equivocaba.  La primera vez cuando puso como excusa de su accidente, que Grosjean le hizo un test brake (frenada anticipada para descolocar). La telemetría demostró que no fue así y consecuentemente fue sancionado.  Pero el dardo lanzado contra Massa en su accidente con Sergio Pérez, aunque descarado, no acertaba en el blanco, porque fueron situaciones diferentes. El pasado año, el sancionado fue el mexicano por cerrar a su rival. en este caso, Verstappen era quien embestía a otro piloto.  “Fue un poco diferente ¿no? Yo estaba en un lado y Pérez movió el coche en la frenada”, contestó el piloto de Williams. 

Verstappen se vuelve a equivocar y ahora se enreda con Massa

Alonso: “La línea es muy estrecha entre ser el héroe o el piloto inexperto”

Por otra parte, el español Fernando Alonso fue preguntado por el tema también este jueves. Sin embargo, no quiso entrar demasiado al trapo: “Nunca  hablo sobre los demás, otros pilotos o ex pilotos sí lo hacen pero no yo. La Fórmula 1 es peligrosa y la velocidad es alta, fue una mala coincidencia cuando tocas el neumático de otro coche, pero afortunadamente los dos están listos y pueden correr”.

Pero alonso también explicaba lo que podía haber sido la otra cara de la moneda: “¿Inexperiencia de Max y su edad?  Si lo hubiera intentado y le hubiera salida hubieran dicho que era muy valiente, y que el piloto joven ponía en la pista sus “balls”(pelotas), la línea es muy estrecha entre ser el héroe o el piloto inexperto, creo que, como he dicho, esto son carreras, y afortunadamente  ambos están bien”.

Felipe Massa durante la rueda de prensa (Efe)

“No voy a cambiar mi estilo de pilotaje”

 Verstappen reconoció  días después de la carrera que en nada iba a cambiar su actitud. “ Yo estaba atacando. Tal vez giraría un poco antes más a la derecha. Pero creo que no habría demasiadas cosas que haría de manera diferente”. Y como dijo en su momento: “No voy a cambiar mi estilo de pilotaje”.

Al holandés reconoció que solo le preocupaba estar bien físicamente tras el accidente: “Estoy contento, no tuve ninguna lesión ni tuve muchos problemas. Fui al karting después y estaba en condiciones”. Tras ver la telemetría, que daba la razón Grosjean y la posterior sanción de FIA, el holandés  reconocía que la sanción de cinco puestos de parrilla le obligará a ser más agresivo: “Voy a tener algo más de trabajo en esta pista. No me va a cambiar como piloto de carreras. Voy a seguir luchando, sobre todo cuando se lucha por los puntos. Voy a ir a por todas”.

«Hizo un movimiento descerebrado»

 En la rueda de prensa,  el brasileño se reafirmaba en   su opinión inmediatamene posterior al  GP de Mónaco, cuando pedía una sanción para el holandés: “Lo que pasó fue muy peligroso. Demuestra que quizás la experiencia cuenta en la F1. Tuvo suerte de no haber salido herido. Para ser sincero, no estaba en posición para adelantar. Si se hiciera daño, entonces todo el mundo hablaría de eso. Se preguntarán por qué le dieron la licencia a un chico de 17 y por qué hace eso. Pero no se ha hecho daño y todo el mundo está contento”, dijo en su momento Massa.

También expresaron su opinión Felipe Nasr y Alan Permane, director de operaciones en pista de Lotus: “Fue muy claro, Verstappen hizo un movimiento descerebrado. Romain no se mueve, o se mueve un poco y eso puedes hacerlo. Está muy claro que lo de Verstappen fue una tontería”, dijo Permane. Ante las críticas, Helmut Marko tuvo que salir en su defensa: “Fue un incidente de carrera y Grosjean también estuvo involucrado, porque él se movió al ver que Max ya estaba allí”.

Johan Cruyff: “A los que pitan el himno nacional les falta un tornillo”

En pleno debate por lo sucedido en la final de la Copa del Rey, en la que una tremenda pitada acompañó los acordes del himno nacional, Johan Cruyff ha metido baza en el asunto para censurar abiertamente a todos aquellos -miles- que provocaron que el Rey Felipe VI y compañía escuchara a duras penas la marcha. El holandés fue concluyente y afirmó en el micrófono de la Cadena Ser de Catalunya que fue una total falta de respeto.

“Pitar el himno nacional es una desgracia absoluta y total, además de una falta de respeto. Considero que al que actúa de esta manera le falta un tornillo”, afirmó el gran referente del barcelonismo desde hace muchos años. Johan Cruyff siempre es muy franco y directo cuando se le pide una opinión y en este caso sucedió lo mismo.

Johan Cruyff aportó una solución para que se hubiera evitada la gran pitada. El holandés considera que la mejor decisión, propuesta que hizo el PNV, habría sido que “se hubieran escuchado los tres himnos, el de España, el de Catalunya y el del País Vasco”. “Dan pena”, remató al referirse a las personas que inundaron de silbidos el Camp Nou.

Por otra parte, aprovechó la ocasión de hablar de Luis Figo, al que el Barcelona no permitió jugar con los veteranos del Barcelona en el partido de leyendas que se disputará en Berlín entre el club azulgrana y la Juventus. “Es una decisión absurda. Conozco muy bien el caso y Figo no tuvo la culpa de lo que pasó cuando fichó por el Real Madrid, fue más culpa del club. Tenía razón y reaccionó al comportamiento de la entidad”, recalcó.

Felipe VI escuchaba el himno a duras penas… mientras Artur Mas sonreía

La pregunta no es cuántos pitaron el himno de España anoche en el Camp Nou. La pregunta es si hubo alguien que no lo hiciera dado el estruendo que se vivió en el estadio del FC Barcelona mientras por megafonía empezó a sonar. Porque sonó, sí. Se escuchó a duras penas y gracias al altísimo volumen con el que se programó, sabiendo ya de antemano los organizadores del partido, es decir, la Federación Española de Fútbol, que iba a haber pitada.

El recibimiento a Felipe VI como Rey de España no fue desde luego agradable. Aguantó estoicamente el chaparrón mirando a un punto indeterminado de la grada, erguido y en silencio, mientras a su lado el presidente de la Generalitat Artur Mas no disimuló una sonrisilla que fue de lo más comentada en las redes sociales. El resto de personalidades en el palco, como el ministro Wert, Ángel María Villar y Josep María Bartomeu fueron más sobrios y lo encajaron con cara de póker. Mientras, en los dos fondos del estadio las aficiones mostraron con orgullo sus pancartas gigantes sin dejar de silbar. ‘Jota ke irabazi arte’, ‘Pegando fuerte hasta la victoria’ era el lema del Athletic mientras que ‘Fent historia’, ‘Haciendo historia’ fue el escogido por la del Barça, en evidente desventaja ayer en su propio estadio ya que las tres cuartas partes del Camp Nou eran claramente para la afición rojiblanca. ¿Y los jugadores? Serios y formando en el campo junto al trío arbitral con una excepción: Aritz Aduriz, que tampoco hizo nada por disimular su sonrisa durante la protesta.

Felipe VI escuchaba el himno a duras penas… mientras Artur Mas sonreía

Virginia Foc fue una de las aficionadas que ayer pitaron el himno. Socia del Barça, 36 años. Estuvo también en la final de Copa del Vicente Calderón: “En Madrid no silbé. A mí no me gustaría que pitaran el mío y por eso decidí no hacerlo. Esta vez sí. ¿Que por qué? Porque han dado una paliza increíble durante la previa del partido en los medios de comunicación. Por molestar, por rebelarme”. Va acompañada de su marido, Oriol Agulla, socio también azulgrana desde que nació. “Pité en Madrid, pité en Sevilla en la final contra el Steaua y ahora también. No soy español, el himno español no me representa y todo lo que ha pasado durante estos últimos días me ha parecido una soberana tontería. No voy a silbar más por eso, silbaré igual. Por tocar els collons”.

Jon Aoiz viajó a la final de Valencia, a la del Calderón y vivió ayer su tercera. Socio del Athletic, a sus 45 años explicaba así por qué silbó: “Por mostrar mi desacuerdo con el Rey y también con la política española respecto al País Vasco y Catalunya. ¿No nos quieren y ahora me piden que me calle? Pues no señor”. Está en Barcelona con tres amigos, todos ataviados de rojiblanco. Uno de ellos, Mikel, apunta: “A mí la verdad es que me da igual. Lo que yo quiero es ganar la final y no distraerme con silbiditos ni gilipolleces”. Son sólo cuatro ejemplos entre los 90.000 espectadores que ayer abarrotaron el Camp Nou.

La polémica por la bronca al himno ha sido omnipresente desde que se conoció que la final la jugarían el Barça y el Athletic de Bilbao y ayer duró lo que tardó en sonar el himno de España. Ni más, ni menos. En cuanto el balón se puso a rodar, lo que importó a unos y a otros era lo que ocurría en el terreno de juego. Ambas aficiones se dedicaron a animar a sus respectivos equipos y no hubo ni una sola dedicatoria ni cántico hacia el palco. Al Rey se le vio hablar durante el partido con Ángel María Villar y también con Mas en alguna ocasión, mientras que Bartomeu y Wert parecieron hacer buenas migas.

Mientras, el Gobierno no tardó en emitir un comunicado lamentando lo sucedido. Lo hizo cuando acababa de comenzar la segunda parte en el Camp Nou: “El Gobierno condena los ataques contra los símbolos que representan al conjunto de los españoles, a la democracia que los ampara y a la convivencia que comparten. De la misma manera, considera que cualquier muestra o manifestación de intolerancia es siempre reprochable, y lo es todavía más cuando busca la repercusión pública aprovechando un espectáculo deportivo que todos los españoles tienen derecho a disfrutar, sin la protesta y la perturbación que algunos quieren imponer”.

El comunicado concluye con el anuncio de una reunión mañana mismo de la Comisión Estatal contra la violencia “con el objetivo de denunciar las actuaciones que fueran inconvenientes y, en su caso, proponer las sanciones que fueran procedentes”. Mientras Artur Mas pedía que “lo repiensen. Se ha de situar en el contexto normal de lo que pasa en este tipo de eventos y no hacer el ridículo”, lo cierto es que el presidente del Consejo Superior de Deportes ya había avisado que se sancionaría a los clubes en el caso de que hubiera pitada. Y sí, efectivamente, la hubo. Y bien fuerte: 119 decibelios, los mismos que un avión despegando y teniendo en cuenta que los 140 son el umbral del dolor humano.