Un grupo de madres contra las armas se moviliza para las legislativas en EEUU

En Sterling, localidad residencial del estado de Virginia, un distrito conservador pero donde el voto demócrata crece a medida que cambia la población, el tema de la violencia por las armas de fuego toma una dimensión especial, ya que la poderosa Asociación Nacional del Rifle (NRA, en inglés) tiene aquí su sede.

La asociación «Moms demand action» (Las madres exigen acciones) se reúne los fines de semana y realizan un recorrido en parejas puerta a puerta con el fin de hablar con los electores para que la indignación provocada por los tiroteos que frecuentemente enlutan al país se traduzca en cambios.

«Si queremos que el Congreso haga algo, tenemos que cambiar a la gente», dijo Dawnee Giammittorio, una militante contra las armas de fuego.

Giammittorio apoya la campaña de Jennifer Wexton, una demócrata que desafía a la actual representante republicana Barbara Comstock, una legisladora a quien la NRA dio la máxima nota posible, según su comportamiento en las votaciones de la cámara.

«Jennifer Wexton definitivamente ayudaría a cambiar el equilibrio de la Cámara», explicó Giammittorio, cuya organización apoya a 3.000 candidatos que aprueban restricciones de «sentido común» a las armas.

La candidata demócrata quiere prohibir los fusiles de asalto así como reforzar los controles de antecedentes judiciales y psiquiátricos para quienes compren armas.

El principal grupo de presión a favor de las armas ha invertido cerca de 140.000 dólares en las campañas de Comstock desde su elección para el Congreso en 2014, según los datos de centro de análisis Center for Responsive Politics.

Para uno de los potenciales votantes que la recibe, que se define como un republicano no tendencioso y que tiene un arma para cazar, no hay vacíos legales en la legislación. (I)