Thunberg llevó su voz al Congreso de EE.UU.

Con solo 16 años, la activista medioambiental sueca Greta Thunberg sacó los colores a los miembros del Congreso de Estados Unidos por la inacción política para frenar el cambio climático, en una comparecencia donde dio voz a las inquietudes de su generación por el calentamiento global.

Su intervención ante una sesión conjunta de dos comités de la Cámara Baja estadounidense fue escueta pero contundente.

“Me llamo Greta Thunberg, no he venido a ofrecer declaraciones preparadas en esta comparecencia”, dijo la adolescente que, en lugar de su testimonio, ofreció a los congresistas una copia del informe de 2018 sobre calentamiento global del Grupo Intergubernamental de Expertos en Cambio Climático (IPCC).

Ese informe del IPCC, que está constituido por científicos elegidos por la ONU y que sirve de guía a los líderes mundiales sobre el calentamiento global, hace hincapié en el impacto de la crisis climática y en la amenaza que supone para los humanos.

“Entrego este informe como testimonio porque no quiero que me escuchen, sino que escuchen a los científicos, quiero que se unan tras las ciencia y entonces quiero que adopten una acción real”, sentenció Thunberg. (I)