Nani Roma: "Para correr el Dakar no hay que estar loco, hay que prepararse"

La semana pasada, MINI convirtió la estación de metro de Chamartín en una improvisada pista de carreras. Qué mejor escenario que la segunda edición de Mini Metro Race para presentar el nuevo modelo John Cooper Works, 231 caballos que tomaron las vías del suburbano con un perfecto maestro de ceremonias. Nani Roma (acompañado de otros pilotos como David Izaguirre, Víctor Sáez, Javi Villa y Luis Miguel Reyes) realizó una exhibición profesional y también tuvo tiempo de charlar con El Confidencial acerca del próximo Dakar y de cómo se prepara para afrontar la prueba más dura del mundo.

Con semejante escenario, era inevitable hablar de la alianza a la que Nani y Mini dan forma: “Siempre ha sido muy positiva. De hecho cuando empezamos con ellos, en 2012, ya fui segundo en el Dakar y luego pude ganar. Es una relación muy buena. Con el coche que hemos llegado, el pequeño Mini, es donde empezó todo. El señor John Cooper Works hizo un coche de carreras y es increíble que tantos años después -porque hablamos de que empezó en los 60- la marca todavía tenga este espíritu. La relación es muy buena porque, al final, vas por el mismo camino. Mini ha hecho un coche para ir al Dakar, es decir, para ir por en medio del desierto. Es gente que hace cosas distintas”.

La carrera más dura del mundo no tarda en salir y es que se podría decir que Nani Roma y Dakar son sinónimos. El piloto catalán confiesa que su siguiente reto para por “intentar ganar otra vez en coche. Ya lo hice en moto y no voy a volver a correr. Ahora el objetivo es volver a conquistarlo más años”. Para lograr su propósito, tendrá que cambiar de aires ya que el Dakar 2016 pasará por Perú, Bolivia y Argentina: “Cambiamos de países. Vamos a empezar por dunas que al ser el primer día ya es duro. A mitad del Dakar vamos a tener tres o cuatro días en altura, toda la parte de Bolivia. Allí es complejo porque el físico y el coche sufren mucho más; estaremos tres días a casi 4.000 metros… es duro. La altura depende de cómo uno se sienta, a veces mejoras y a veces empeoras, nunca sabes por muy bien que estés físicamente. Y al final llegará Argentina que hace mucho calor. Será un Dakar intenso, todos lo son pero este tiene pinta de serlo mucho”.

¿Y cómo se prepara un piloto para afrontar el Dakar? Hay que reforzar tanto el aspecto físico como el psicológico. Para el primero de ellos “trabajamos y entrenamos todos el año. Cuando se acercan los meses previos al Dakar hacemos mucho más gimnasio, entrenamos en cámaras para habituarnos a la altura. Hacemos un trabajo constante porque físicamente es intenso”. Para el segundo cuenta con la ayuda de “un psicólogo deportivo con el que trabajo desde hace muchos años en el CAR de San Cugat. Allí hacemos diferentes técnicas para intentar estar mucho tiempo concentrado, pero bueno, cada uno tiene sus sistemas”.

El reto de participar en un Dakar no es apto para todos los públicos, por ello le preguntamos a Nani si hace falta un punto de locura para embarcarse en una aventura de tal calibre: “No, sinceramente no. Lo que tienes que estar es preparado. Como en cualquier cosa que quieras hacer en la vida: uno tiene que estar preparado y saber qué es lo que hace. Lo que pasa es que, a veces, gente que hace el Dakar porque lo ve por la tele muy fácil y es allí donde pasa a ser peligroso. Es como si yo me cojo un barco y quiero hacer la vuelta al mundo; no sé, así que será peligroso. Por tanto, lo importante es estar preparado para aquello que vas a hacer”.

Asegura que, de momento, no ha vivido ninguna situación en la que los límites hayan saltado por los aires: “Por ahora no lo he tenido nunca. El día que me pase, dejaré de correr”. Lo dice alguien para el que el Dakar “es la mitad de mi vida; llevo 21 participaciones en el Dakar y 43 años. Es mi vida, he estado la mitad de mi vida corriendo el Dakar y en él he aprendido muchísimo tanto personal como profesionalmente; me ha aportado muchísimo. Y que por muchos años sigamos allí”. Y es que, de momento, no habla de retirada: “No, por favor, soy muy joven”.