Cuentan que pocos moteros que hayan asistido alguna vez en su vida al Gran Premio de España, procedan de donde procedan, no conocen o no han escuchado hablar de El Cuervo. Este pueblo, el último al sur de la provincia de Sevilla -tan al sur, que algunas de sus calles pertenecen a la de Cádiz-, es lugar de paso obligado para todos aquellos amantes del motor que, en su camino hacia el circuito de Jerez, prefieren circular por la antigua carretera Nacional IV y así ahorrarse el peaje de la autopista AP-4. Pero, sobre todo, lo hacen por una razón pasional: saborear el ambiente de las dos ruedas.
La carretera nacional, que atraviesa El Cuervo dividiéndolo en dos, es la ruta de peregrinaje para los que ansían alcanzar la ‘meca’ del motociclismo. Sólo 20 kilómetros separan El Cuervo de Jerez, por lo que esta ruta hace años que se convirtió en la antesala de la fiesta del motociclismo que se vivirá hasta el domingo, cuando se disputen las carreras de Moto3, Moto2 y MotoGP. El espectáculo, dicen los entendidos, está servido. Desde este miércoles por la tarde ya se veía circular a decenas de moteros por la N-IV. Este jueves fueron centenares. El viernes, miles. Cada vez que un semáforo se pone en rojo, un rugido al unísono de multitud de motos atruena los oídos de los vecinos de El Cuervo.
Algunos de ellos quieren hacer negocio con el gran premio. A la salida del pueblo, en el arcén derecho, hay quien ha levantado una ‘tienda’ con utensilios de motero: se venden desde cascos hasta chaquetas a 60 euros. Las terrazas de los bares de este pequeño pueblo de 8.500 habitantes se muestran llenas de hombres y mujeres enfundados en trajes de cuero. Los hostales ya no disponen de camas libres. Los quioscos venden hasta las cervezas que quedan al fondo de las neveras. Aquí, el agosto se hace cada primavera con la llegada de esta serpenteante hilera de motos.
“Jerez, para los que nos gustan las motos, es el paraíso”, dice Juan Gutiérrez, un gijonés de 34 años que desayuna este jueves en el bar Santa Ana de El Cuervo junto a su mujer, Ana Marín. Ella cuenta que años atrás estuvieron en los circuitos de Barcelona, Aragón y Assen (Holanda), pero que el trazado gaditano “tiene un algo que lo hace diferente”. El matrimonio lleva cinco años seguidos viniendo.
“Será la gente, Andalucía, el calor de la primavera, la fiesta que se vive en los pueblos de alrededor, la playa a diez minutos…” relata Ana. “Pero Jerez siempre es especial. Durante las carreras el público se vuelve loco. En otros circuitos todo es mucho más tranquilo”, añade la motera mientras va dando mordiscos a su media tostada con manteca colorá. “Se me olvidaba -dice señalando su desayuno-, la comida también cuenta” (risas).
El circuito de Jerez alberga desde 1987 una de las pruebas del Mundial de Motociclismo. Durante varios años también dio cobijo a las carreras de Fórmula 1. Fue su ex alcalde, Pedro Pacheco -hoy en la cárcel- quien mandó construirlo para sustituir al trazado urbano de la avenida Álvaro Domecq, donde se disputaba el gran premio Nuestra Señora de la Merced.
Esta tradición en el mundo del motor ha traído una grata sorpresa para la ciudad: la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) ha elegido Jerez como ‘Capital Mundial del Motociclismo’ de aquí a 2017. El reconocimiento de ser la primera ciudad sobre la que recae este título convierte a la población gaditana en el mayor referente planetario para los amantes de este deporte. Si hasta la fecha Assen era considerada la ‘catedral’ de las motos, desde ya Jerez la ha rebasado como epicentro mundial.
Aunque los entrenamientos oficiales no arrancan hasta este viernes, durante los días previos al gran premio se han sucedido los actos en los que han participado algunos de los principales pilotos. El ex campeón del mundo Jorge Lorenzo acudió este miércoles al ‘paseo de la fama’ que Jerez ha creado para los pilotos. Allí, el balear del equipo Yamaha se fotografió junto a la estrella que lleva su nombre. El propio Lorenzo reconoció sentirse sumamente agradecido porque fue en el trazado jerezano donde, con 15 años, debutó oficialmente en el Mundial de 125cc. “He conseguido que la última curva del circuito lleve mi nombre -dijo el bicampeón del mundo- y ahora esta estrella de la fama”.
Jerez es el paraíso de los moteros
Pero si eso fue el miércoles, sólo un día después Repsol inauguró una exposición de 50 fotografías que sirve de repaso a los 47 años que lleva patrocinando equipos de motociclismo y automovilismo. Subidos en varios coches antiguos, entre cámaras de televisión, flashes de fotógrafos y gritos de jovenzuelas desatadas, Nicky Hayden, Ángel Nieto o Marc Márquez acudieron hasta los claustros de Santo Domingo, en pleno centro de Jerez, para dar el pistoletazo de salida a una muestra que puede ser visitada gratuitamente hasta el próximo 17 de mayo. En ella, además de las imágenes, también se pueden ver muy de cerca motos legendarias, como la Derbi de 50cc de Ángel Nieto o la que Marc Coma utilizó en 2006 para ganar el rally Lisboa-Dakar.
Durante los tres días del evento deportivo toda la provincia de Cádiz se beneficia económicamente de la llegada de decenas de miles de motos. En Jerez ya no hay habitaciones de hotel, mientras que en otras localidades gaditanas como El Puerto de Santa María, Rota, Chiclana o Arcos de la Frontera apenas quedaban este jueves un 5% de camas libres. La pasada edición del GP de España dejó 53 millones de euros en la zona de influencia de Jerez, aunque la alcaldesa de la ciudad, María José García Pelayo, prevé que en 2015 “se va a mejorar” esa cifra. También señaló que, a mediados de esta semana, el ritmo de venta de entradas era un 10% superior al año pasado.
Durante este puente, y sólo como consecuencia de la llegada del Mundial de Motociclismo a Jerez, se esperan 270.000 desplazamientos, un 4% más que en la edición del año pasado. En el operativo de seguridad participarán 5.000 personas: 1.500 agentes de la Guardia Civil, 700 policías nacionales, 250 policías locales, técnicos de la Dirección General de Tráfico (DGT) y del 112, voluntarios de Cruz Roja y Protección Civil, así como los propios efectivos del circuito. Todo para evitar que se produzcan carreras ilegales, excesos de velocidad… y muertes, como en más de una edición sucedió.
Ha sido este jueves el propio Ángel Nieto quien, ante los medios de comunicación, se ha encargado de pedir “prudencia” y “cautela” a los motoristas. El 12+1 veces campeón del mundo de motociclismo ha recordado que son los pilotos profesionales quienes deben “llevar al límite” los tiempos y sus máquinas, pero no los aficionados, quienes, ha dicho, tan sólo deben preocuparse de disfrutar del rugido que cada primavera ensordece Jerez durante varios días.