Desde la llegada de Vinyals al banquillo del Miniestadi, el Barça B acumulaba 11 partidos sin ganar: siete derrotas y cuatro empates. Una racha muy parecida a la que llevaba Munir sin marcar un gol: 12 jornadas. Ambas se rompieron ayer con la victoria del filial azulgrana ante la Ponferradina, por 2-1, y con el tanto de Munir, el segundo del equipo, después de una certera vaselina cuando el partido ya agonizaba. El delantero, elogiado al principio de la temporada por sus destacas actuaciones con el primer equipo, estaba peleado con el gol desde que Luis Enrique, ya con los delanteros titulares disponibles, cumplida la sanción de Luis Suárez, decidió que regresara al filial, en posición de descenso en Segunda A: se jugaba la jornada 13 y el filial se enfrentaba al Numancia.
Munir, al fin y al cabo, sólo ha anotado dos goles con el Barça B: el de ayer y el que le marcó al Sabadell. Ha marcado un tercero, quizá el de mayor impacto, contra el Elche en el Camp Nou. Munir llegó incluso a debutar con la selección española absoluta, dirigida por Vicente del Bosque, cuando se especulaba con una convocatoria de Marruecos.
El tanto ha dado un poco de vida al Barcelona. La victoria de Osasuna, el equipo que marca la línea del descenso, obligaba a los muchachos de Vinyals a ganar sin excusa al Ponferradina. Los azulgrana se adelantaron en el marcador al inicio de la segunda parte con una falta directa que transformó Grimaldo. La Ponferradina, sin embargo, empató con un tanto de Acorán que pasó por debajo de las piernas del meta Suárez y pudo resolver el duelo en la jugada siguiente, y más después de la expulsión de Palencia. Ocurrió entonces que Sergi Juste profundizó en largo para Munir y el delantero marcó tras un excelente control y exquisito remate: 2-1. Ni la expulsión de Grimaldo impidió que los azulgrana cantaran victoria y se sitúen a tres puntos de Osasuna. Quedan siete jornadas y la permanencia se presenta muy complicada para el filial, pero menos desde el gol de Munir.