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Se estudia un vínculo entre la vacuna de Johnson & Johnson y el síndrome de Guillain-Barré

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Éste sí es Nadal: levanta al público con su mejor tenis y aplasta a Bolelli

Rafa Nadal ya está en cuartos ed final. El tenista español pasó por encima de Simone Bolelli (6-2,6-2), firmando uno de los partidos más completos de la temporada, que quedó definido en el antepenúltimo punto del partido: el español devolvió una dejada que tenía perdida para acabar llevándose el punto con un espectacular globo que puso en pie toda la Caja Mágica. Serio, muy completo y, especialmente, muy bien de piernas, este Nadal sí es el jugador que conocemos y que tantas alegrías ha dado al tenis.

Bolelli comenzó el partido con muy serio, consciente de que necesitaba hacerlo perfecto si quería tener alguna oportunidad. El italiano salió mucho más enchufado, lo que valió para llevarse su primer servicio con insultante comodidad y poner en peligro el saque del español. A Nadal no le está funcionando en exceso el primer servicio en lo que va de año, y los primeros minutos de estos octavos no fueron una excepción. Una doble falta en su primer saque más un 15-40 le puso contra las cuerdas.

Nadal jugará este viernes los cuartos de final contra Dimitrov (Efe)

Pero Nadal no perdió la calma y siguió con la mentalidad que mostró ante Johnson: tratar de hacer las cosas sencillas, sin complicaciones, para poco a poco ir incrementando su nivel. No solo fue capaz de levantar su servicio, sino que su puño cerrado demostraba que acababa de conseguir una inyección de moral. Tras otro buen juego al servicio de Bolelli, apareció el mejor Nadal: serio, concentrado y entendiendo a la perfección qué debía hacer en cada momento. El español iba a romper el partido.

No sólo iba a igualar a dos el partido tras un perfecto servicio, sino que iba a aparecer un enorme restador, con golpes profundos y de lado a lado, para desarmar al italiano y colocarse por delante en el marcador. Bolelli, que estaba jugando muy bien desde el fondo de la pista, poco o nada pudo hacer ante Nadal, capaz de sacar momentos brillantes de tenis para conseguir el deseado break. Empezaba a verse el Nadal que no se había visto hasta ahora: no sólo un gran pegador, sino un magnífico defensor.

Ese Nadal aún no había aparecido en la presente temporada, salvo en contadas ocasiones. Ese jugador capaz de correr incansablemente de lado a lado, pelear cada bola para agarrarse al partido como si fuera el ultimo punto. Pues ese Rafa apareció este jueves en Madrid. Tras confirmar el break, de nuevo iba a mostrar su mejor versión al resto para poner con ventaja de 5-2 en el marcador. Cargado de moral, su gran juego desde el fondo de la pista fue suficiente para cerrar el primer set (6-2).

El segundo set fue un paseo

Nadal le había comido la moral a su rival, que no encontraba la manera de frenarle. Quizá aún tenía en su cabeza las dos bolas de break que tuvo en el segundo juego del primer set y que le podían haber dado una clara ventaja. Pero el italiano, desde el momento en el que el número cuatro del mundo fue capaz de romperle el servicio, no fue capaz de volver a encontrarse en el partido. Así, el español conseguía romperle el saque en el primer juego del segundo set para encaminar el partido.

Por momentos, en la Caja Mágica se vio al mejor Nadal (Efe)

Desde ese momento ya hubo poco tenis: la mejor versión de Nadal en lo que va de torneo le sirvió para frenar las expectativas del italiano, incapaz de salir del problema en el que se veía sumido con su juego: sin funcionarle el servicio, el español tan solo debía meter bolas en pista contraria, que el desmoralizado rival ya se encargaba de mandarlas fuera. Nadal sólo tuvo que dejarse llevar, además de firmar un brillante punto en el último juego del choque, para acabar con Bolelli por un contundente doble 6-2 que le permite meterse a cuartos de final.

Pese a las pocas dificultades que le hizo pasar su rival, las buenas noticias siguen creciendo en torno a Nadal. Ya no sólo estamos ante un jugador con gran pegada, pero intermitente en los partidos. Este jueves, Nadal sacó su mejor versión, al menos la más completa y contundente, para meterse en cuartos de final. Grigor Dimitrov será su próximo rival. ¿Hasta dónde puede llegar el español? Sólo los partidos lo dirán, pero, desde luego, éste sí es el Nadal que todos conocemos.

La nave espacial rusa descontrolada caerá a la Tierra entre el 7 y el 11 de mayo

La nave rusa Progress-59, un carguero espacial no tripulado que ha quedado fuera de control tras un fallo en su puesta en órbita la semana pasada, volverá a entrar en la atmósfera terrestre entre el 7 y el 11 de mayo “dependiendo de las condiciones atmosféricas”, según ha indicado el Centro Espacial Johnson (en Houston, EE UU). La mayor parte de la nave se destruirá en el aire por el rozamiento y “la zona de caída de restos que no se quemen en la atmósfera, puede ser cualquiera en el rango comprendido entre los 52 grados de latitud Sur y los 52 norte”, continúan los expertos de la NASA. La mayor parte del vehículo no sobrevivirá a las altas temperaturas de la reentrada atmosférica, pero puede haber piezas que sobrevivan, como el pesado mecanismo de enganche en la Estación Espacial Internacional (ISS), a la que se dirigía el carguero con suministros. En cualquier caso, señala la agencia espacial estadounidense, es “altamente improbable que suponga una amenaza para nadie”. No son raras las reentradas incontroladas y normalmente los restos que puedan quedan de una nave caen al mar, al desierto o en zonas despobladas, añaden los expertos: “Ni una persona ha resultado nunca herida por una pieza de reentrada de un satélite o un trozo de basura espacial en seis décadas de vuelos espaciales”.

Los responsables espaciales rusos aún no han determinado la causa de la pérdida de la Progress 59, pero la han dado ya por pérdida tras repetidos intentos de recuperar el control del vehículo. Con casi tres toneladas de alimentos, combustible y piezas de repuesto para la ISS, el carguero fue lanzado desde el cosmódromo de Baikonur (en Kazajstán) el pasado 28 de abril con un cohete Soyuz 2-1A. La primera parte del ascenso se desarrolló sin contratiempos y, ya en órbita, la Progress 59 incluso abrió sus dos paneles solares. El paso siguiente era desplegar las antenas, incluida la denominada Kurs, de navegación. Y en ese momento se vio que había problemas. El centro de control en Moscú no logro establecer una comunicación estable con la nave pero, por las imágenes recibidas, se constató que la Progress 59 estaba indebidamente girando sobre sí misma. Los repetidos intentos de recuperar el control de la nave han sido infructuosos. El enganche en la ISS ha sido descartado porque incluso el sistema de manual, alternativo al automático, exige la plena comunicación del centro de control con el carguero, y no se ha logrado.

Es “altamente improbable que suponga una amenaza para nadie”

Los astronautas de la ISS (actualmente seis están en la base espacial, en órbita a 400 kilómetros de altura) recibieron la semana pasada instrucciones de intentar ver el carguero ruso y efectivamente lo han fotografiado, a gran distancia, aún en rotación. La nave descontrolada no supone ningún peligro para la estación, insiste la NASA.

La principal línea de trabajo de los expertos rusos que analizan la situación se centra en algún problema originado en la separación de la Progress 59 de la tercera etapa del cohete Soyuz 2-1A para iniciar su vuelo en solitario, pero aún no lo han confirmado, señala la NASA.

Los seis astronautas de la ISS tiene suministros suficientes hasta principios o mediados de agosto aunque no llegará hasta entonces ninguna otra nave de carga. En el peor de los casos cabría reducir la tripulación. Pero está programado el vuelo de una nave de carga estadounidense CRS-7 Dragón para las próximas semanas. También se podría contar con la siguiente Progress prevista, que partiría con un cohete Soyuz –U y no con el modelo Soyuz 2-1A con el que parece haberse originado el problema actual.