El Ayuntamiento de San Sebastián asumirá la reforma integral del estadio de Anoeta con la ayuda de la Real Sociedad, que aportará el proyecto del nuevo campo y asumirá el coste de las obras, según ha explicado hoy el alcalde donostiarra, Juan Karlos Izagirre. La sociedad municipal Anoeta Kiroldegia licitará las obras, que se ejecutarán «en el marco del actual convenio de uso y explotación» que disfruta el club hasta 2033.
Izagirre ha informado de que Ayuntamiento y Real Sociedad han optado por esta nueva fórmula «sin coste» para las arcas municipales y que permitirá comenzar las obras en mayo de 2016.
Para llevar adelante la gestión de la reforma, la próxima semana se constituirá una comisión mixta de seguimiento, formada por todos los grupos políticos, la dirección de Anoeta Kiroldegia y la Real Sociedad. El club está dispuesto a facilitar el proyecto del nuevo estadio que había redactado para el concurso invalidado, así como el nuevo Plan Especial urbanístico de la zona «si fuera necesario», según Izagirre.
Izagirre ha asegurado que ha mantenido «múltiples contactos informales» con el presidente blanquiazul, Jokin Aperribay, para llegar a esta solución y salvar los obstáculos legales y jurídicos que el consistorio ha encontrado hasta ahora para poner en marcha la ampliación del recinto deportivo.
El Organo Administrativo de Recursos Contractuales (OARC), dependiente del Gobierno vasco, anuló en febrero pasado el concurso público para remodelar y gestionar Anoeta al considerar que sus pliegos concedían una «ventaja ilegítima» a la Real Sociedad respecto a otros posibles licitantes. Hace ahora un año, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) echó abajo la pretensión del Ayuntamiento de San Sebastián y la Real Sociedad de construir cuatro torres comerciales en las esquinas de Anoeta para financiar las obras de un estadio de fútbol sin pistas de atletismo y un aforo de 45.000 espectadores. La Sala de lo Contencioso-Administrativo ha anulado la modificación del Plan General de la ciudad que permitía crear cuatro edificaciones para obtener 15.800 metros cuadrados destinados a usos terciarios.
El tercer intento opta por otra vía distinta a las anteriores. Anoeta Kiroldegia, la entidad pública propietaria del estadio, licitará las obras, y será finalmente la Real Sociedad la encargada de financiar el coste, que el propio club estimó en unos 40 millones de euros. Izagirre señaló que el club de fútbol está dispuesto a aportar el 25% del cose establecido por el convenio para «grandes reparaciones», a los que añadirá los 10 millones que el Gobierno vasco se comprometió a conceder. Además de estas cantidades, ha comentado Izagirre, la Real «buscará fórmulas para la financiación». Aperribay anunció recientemente que su patrocinador chino Qbao financiaría el 20% (ocho millones) de las obras.