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La mejor gama media de OPPO acaricia el nivel superior con el OPPO Reno8 Pro, un teléfono de gran calidad que rebosa distinción por cada milímetro. Es muy bonito, se distingue del resto por fuera, incluye un hardware de alto nivel y, como es casi obligatorio en la categoría a la que se dirige este Reno 8 Pro, también promete muy buenas fotos. Habrá que comprobarlo.

No puede decirse que el catálogo europeo de OPPO sea pequeño, ya que el fabricante fue colmando los distintos niveles de precio con móviles acordes con lo que se espera por el respectivo coste. Y los Reno van a caballo entre la gama media y la alta, todo depende de su apellido. ¿Que hace gala del «Pro» para distinguirse? Pues toca ponerlo todo en dicho empeño. Justo lo que hace el OPPO Reno8 Pro, lo hemos comprobado en primera persona.

Ficha técnica del OPPO Reno8 Pro

Diseño: bonito en lo subjetivo y muy característico

Solemos hacer referencia a que los productos de OPPO se distinguen por la apariencia, una característica que logra un nuevo nivel en el OPPO Reno8 Pro: es impactante a la vista. Bajo nuestra opinión, el diseño del teléfono es muy atractivo; por más que el gigantesco módulo trasero de cámaras despierte cierta aversión en algunas personas (hemos tenido opiniones contrarias tras enseñar el OPPO Reno8 Pro).

El aluminio del cuerpo se siente sólido en la mano, arroja un tacto de gran calidad y queda rematado por una doble cara de cristal donde destaca el citado módulo fotográfico trasero. Dicho módulo parece emerger de una superficie líquida; una sensación que reduce a la vista la protuberancia del módulo. Se parece mucho a lo que OPPO logra con el OPPO Find X5 Pro.

Además

El conjunto de cámaras trasero remata con carisma el excelente trabajo en diseño. Lástima que dicho módulo sea demasiado grande, ha despertado sensaciones negativas cuando hemos enseñado el móvil
Aluminio, cristal endurecido y cantos rectos, las similitudes con los iPhone son bastante claras. Esto hace que el OPPO Reno8 Pro se clave ligeramente en la mano al agarrarlo, en especial si las manos que lo sujetan no son demasiado grandes. Se muestra muy ancho, en línea con las dimensiones (el OPPO Reno8 Pro es bastante grande). No se hace excesivamente pesado.

Además

El tratamiento de color que aplica OPPO al teléfono logra una armonía muy agradable, al menos en la unidad azul que hemos probado. El aluminio se presenta en un tono muy similar al cristal de la cara trasera; que ofrece un color sin degradados, elegante y muy poco común.

El OPPO Reno8 Pro carece de conector de auriculares, posee el USB C centrado en el borde inferior del teléfono y divide los botones de control en ambos costados del teléfono: derecho para el de encendido, izquierda para los de volumen. Se hacen algo incómodos de pulsar, quedan demasiado altos si se utiliza el móvil con una mano. Precisamente, el ratio 20:9 hace que el OPPO Reno8 Pro se muestre algo alargado.

Para ser un gama alta de precio elevado, el OPPO Reno8 Pro no posee protección contra polvo y agua. Por la categoría del teléfono, una certificación IP68 le habría venido bien
Frontal bien aprovechado con los marcos superior e inferior casi simétricos, segundo altavoz externo junto a la bandeja doble nano SIM en el canto inferior (uno a cada lado del USB C) y el citado módulo fotográfico en la cara trasera. Como remarcamos, el módulo es de tamaño exagerado y se ve muy grande al mirar el móvil por detrás. Aunque eso sí, también otorga un notable carácter al OPPO Reno8 Pro. Con otro punto algo negativo: la citada cara trasera resbala. Mucho. Casi como una pastilla húmeda de jabón: es muy fácil que el móvil se caiga al suelo si la mesa está algo inclinada.

Pantalla: gran calidad con cierto déficit de brillo

El OPPO Reno8 Pro carece de bordes curvados para su pantalla AMOLED de 6,7 pulgadas, ésta es una buena noticia para quien no gusta de este elemento. El frontal es limpio, casi simétrico en sus marcos (sin que éstos sean exagerados) y con la sensación de calidad que arrojan los mejores paneles.

El contenido se ve a la perfección, el contraste es alto y ofrece una excelente reproducción de color: personalizable en temperatura, sin excesiva saturación de serie (se obtienen mejor visibilidad con los colores naturales) y con buena nitidez.

Además

El panel se ve muy fluido gracias a la alta tasa de refresco: hasta 120 Hz de frecuencia. Activar esta opción conlleva un lógico incremento en el gasto de batería y sin que la penalización resulte tan grave como para no usarlo (la experiencia con el teléfono mejora en gran medida). En cuestión de funcionamiento, el OPPO Reno8 Pro mantiene los 120 Hz en la mayor parte de las aplicaciones a interfaz, incluso con el fondo de pantalla estático (tarda algunos segundos en reducir la frecuencia a 60 Hz). En algunas aplicaciones puede rebajar la tasa de refresco hasta los 90 Hz, aunque con esta frecuencia se notan saltos en el desplazamiento (como ocurre en Twitter).

La pantalla del OPPO Reno8 Pro se ve genial en la mayoría de condiciones, al menos mientras no se visualice en exteriores y bajo la luz del sol: aquí existe cierta dificultad para distinguir correctamente lo impreso en el panel. Y sin que se vea impedido del usarse en exteriores, claro. El brillo automático es responsable.

La respuesta al toque es excelente, los ángulos de visión son muy buenos, el brillo mínimo molesta en completa penumbra, OPPO incluye distintas mejoras visuales por software con las que potenciar la visualización del contenido y pone especial énfasis en el vídeo: además de ser compatible con HDR (HDR10+), dispone de un potenciador con el que darle más vida a los colores (a costa de saturarlos).

El lector de huellas bajo la pantalla es suficientemente preciso

OPPO no hace experimentos con la biometría en su nuevo teléfono de la gama Reno: la marca incluye un lector óptico de huellas dactilares que se esconde bajo la pantalla, en una zona que queda perfectamente accesible al dedo pulgar. Dicha zona es algo más baja que en otros modelos sin que hayamos encontrado inconvenientes al utilizar el sensor.

El OPPO Reno8 Pro se desbloquea al instante tras aplicar la huella, la precisión es buena y no acostumbra a pedir una segunda lectura por fallar una primera. Además, el móvil incluye desbloqueo facial con la cámara delantera; más práctico, aunque también algo menos seguro. Y ofrece doble toque en pantalla para apagar y encender el panel (combinado con el desbloqueo facial acelera en gran medida el desbloqueo del teléfono).

Sonido: un excelente reproductor de música

El espíritu de gama alta también se deja escuchar, en todos los aspectos: el hardware dedicado al sonido mantiene la categoría que se le debe demandar a un móvil con las aspiraciones del OPPO Reno 8 Pro. Y poco importa que se escuche música a través del altavoz estéreo dual, mediante auriculares con cable o haciendo uso del Bluetooth: la escucha queda a un notable alto.

Nuestro protagonista carece de conector de auriculares, esto resta puntos (por más que esta carencia sea, desgraciadamente, habitual). Aun así, el OPPO Reno8 Pro posee salida analógica a través del puerto USB C: basta con usar un adaptador a jack de 3,5 mm para conectar al teléfono cualquier pareja de auriculares con cable. Que incluya DAC es una muy buena noticia, ya que amplía la compatibilidad y no encarece demasiado el uso de auriculares.

Además

El audio es de muy buena calidad, hemos utilizado unos Bose de alta gama con cable para probar la escucha de música a través del USB C. Gran nivel de volumen, opción a personalizar el audio con el ecualizador incluido en los ajustes de sonido, mejora Real HD Sound con la que enriquecer la escucha (se nota especialmente en los graves), bajos con cierta presencia y gran riqueza de matices. Escuchar música con unos auriculares de calidad es una delicia, también ver películas o disfrutar de los juegos.

El OPPO Reno8 Pro no tiene conector de auriculares, pero sí posee salida analógica de audio a través del USB C. No puede conectarse a un monitor externo mediante dicho USB C (carece de salida de vídeo)
¿Y en modo inalámbrico? OPPO mantiene la calidad sin desmerecer ni un ápice la reproducción de sonido. Además, el teléfono es compatible con una gran colección de códecs Bluetooth: SBC, AAC, LDAC, LHDC y la colección de Qualcomm aptX (normal, HD, Adaptive y TWS+).

Para terminar, toca hacerle mención a la pareja de altavoces externos duales: uno en el borde inferior, junto al USB C; otro anclado al área superior de la pantalla, en el auricular de llamadas. Son muy potentes, no distorsionan en exceso incluso a máximo volumen y alcanzan un nivel de presión sonora de unos 89 dB (medidos durante la reproducción de música).

Potencia: rápido y con gran rendimiento

Como buen gama alta que es, el móvil que ocupa nuestra mesa de review hace gala de máxima potencia para no sólo conseguir mayor fluidez en cualquier tarea, también el acceso a los juegos de gran carga gráfica se realiza con excelente ejecución en 3D y con cierto calentamiento general calentamiento (durante sesiones largas a alta potencia la temperatura sube de forma notable, casi hasta hacer molesto sostener el teléfono).

El MediaTek Dimensity 8100-MAX es una bestia, está a la altura de lo mejor de Qualcomm en gran parte de los aspectos, incluso en entornos gráficos. Hemos estado probando juegos como Genshin Impact, Fortnite o PUBG a la máxima resolución y frecuencia posible sin que la experiencia se viera lastrada en momento alguno. Los gráficos fluyen a la perfección sin saltos en las animaciones, el OPPO Reno8 Pro mantiene el rendimiento sin decaer y la pantalla colabora en la experiencia arrojando alta frecuencia y calidad visual. Es un excelente móvil para juegos, lástima que los cantos rectos del diseño hagan algo molesto sujetar el móvil durante mucho tiempo.

Las pertinentes pruebas de benchmark realizadas al OPPO Reno8 Pro muestran el gran rendimiento del MediaTek Dimensity 8100-MAX.

No nos hemos encontrado con problemas durante el uso, el rendimiento arrojado por el OPPO Reno8 Pro fue muy alto. Además, incluye almacenamiento de sobra (256 GB) y suficiente memoria RAM (8 GB), ambas de alta velocidad. El móvil carece de memoria SD, ofrece bandeja inferior para doble nano SIM, es muy veloz bajo redes WiFi y también en redes móviles. No nos hemos topado con inconvenientes de cobertura, ni usando datos móviles ni WiFi.

Batería: la guinda a un gran aguante lo pone la carga rápida

El fino grosor de nuestro protagonista (excepto en el área de cámaras) limita en parte la capacidad máxima de la batería: los 4.500 mAh no es lo máximo que puede verse en un gama alta de la categoría del OPPO Reno8 Pro. Aun así, la autonomía queda a un buen nivel, sobre todo por la economía energética que practica el sistema.

El día de uso intenso está asegurado, incluso con parte del tiempo dedicado a los juegos. Nos hemos llevado de viaje el OPPO Reno8 Pro logrando autonomías de jornada y media/dos jornadas con un uso habitual; y más de cinco horas de pantalla a 120 Hz. Quizá no sea un sobresaliente en batería, sí queda a la altura del notable. Y sin que hayamos notado recortes en el segundo plano o las notificaciones.

Además

Si bien la autonomía es buena, donde destaca especialmente el OPPO Reno8 Pro es en la carga: los 80 W que proporciona el cargador incluido logran que el móvil reviva en dos suspiros (lástima que OPPO no incluya carga inalámbrica, sería un buen añadido). El calentamiento no es problema, ya que el móvil contiene en buena medida la temperatura de carga. Los tiempos quedan de la siguiente manera:

• 5 minutos de carga: 20 % de batería.
• 10 minutos de carga: 39 % de batería.
• 15 minutos de carga: 56 % de batería.
• 20 minutos de carga: 71 % de batería.
• 25 minutos de carga: 85 % de batería.
• Total: 34 minutos.

Software: una experiencia muy OPPO con amplio espacio para la personalización

ColorOS 12.1 no ofrece la experiencia más Android «puro» posible, ya que el aspecto de la capa se mantiene notablemente personalizado por OPPO. Aun así, se aprecia un cierto acercamiento a los estándares de Google: tanto por el diseño de la interfaz como por la inclusión de la personalización de colores. En este sentido cobran especial interés Android 12 y Material You.

El móvil parte actualizado a la última versión de la capa (12.1), la penúltima de Android (12, a la espera de que llegue Android 13) y con el parche de seguridad de agosto. OPPO no incluye excesivas apps añadidas a las propias de Google, aunque sí ofrece un álbum de fotografía, modo de juegos, reproductor de vídeo o app del tiempo. No peca de bloatware, ni siquiera preinstalando las apps y servicios de Facebook.

Además

La capa se mueve a la perfección, ColorOS 12.1 ofrece personalización a raudales, la contención del sistema en el gasto energético es notable, posee gran cantidad de gestos avanzados de control, permite hacer uso de todas las capacidades del procesador con el modo de rendimiento, hace gala de multitarea con ventanas flotantes y otros elementos de interacción (pantalla partida, barra lateral inteligente e inicio rápido desde el lector de huellas) e incluye un modo a una mano muy cómodo de utilizar (y que se activa con un simple gesto en la parte baja de la pantalla).

ColorOS 12.1 se acerca a Android desde el diseño recargado tan propio de las capas chinas. Aun así, mantiene carácter y, sobre todo, mucha utilidad: el software es perfecto para quien quiere hacer del OPPO Reno8 Pro un móvil propio.

Cámara: más ambición que resultados

Ya hemos visto que OPPO remarca las cámaras montadas en el Reno8 Pro, no en vano su módulo fotográfico es uno de los aspectos más destacados. Con gran espacio físico para los sensores y objetivos, nuestro protagonista se desenvuelve muy bien en cualquier escena para sacar pecho cuando toca capturar la luz, por poca que haya. Eso sí, los resultados no son siempre los mejores.

Además

Empecemos por el hardware. Con una doble cámara trasera como eje fotográfico, el OPPO Reno8 Pro se caracteriza por traer el chip de procesado MariSilicon X desde la gama Premium del fabricante a la gama alta.

• Cámara principal. Sensor Sony IMX766 de 50 megapíxeles con apertura f/1.8, tamaño del sensor de 1/1.56 pulgadas, ángulo de visión de 86º, autoenfoque PDAF multidireccional y tamaño de 1.0 µm para cada píxel. Sin estabilización de imagen mecánica (OIS), sí electrónica (EIS).
• Cámara gran angular. Sensor de 8 megapíxeles con apertura f/2.2, ángulo de visión de 112º, tamaño del sensor de 1/4.0 pulgadas y 1.12 µm para cada píxel.
• Cámara macro. Sensor de 2 megapíxeles con apertura f/2.4 y ángulo de visión de 89º.
• Cámara frontal. Sensor Sony IMX709 de 32 megapíxeles con apertura f/2.4, tamaño del sensor de 1/2.74 pulgadas, ángulo de visión de 90º, autoenfoque y tamaño de 0.8 µm para cada píxel.
• Otros. Chip NPU MariSilicon X, grabación de vídeo de hasta 4K y 30 fps, grabación de vídeo estabilizado (EIS) hasta 1080p y 30 fps.

El OPPO Reno8 Pro pone todo el músculo en la cámara principal trasera de 50 megapíxeles y en la inclusión de su chip NPU para potenciar la naturalidad y captura de luz durante el procesado: el MariSilicon X. Igual que ya vimos en el OPPO Find X5 Pro, dicha NPU tiene un funcionamiento discreto en lo que a resultados fotográficos se refiere, aunque sí se aprecia en determinadas tomas donde la luz es generosa y uniforme: los colores revelados en la foto, y la iluminación, quedan muy logrados, también naturales.

Además

Durante el día no suele haber mayores problemas: las fotos tomadas con el sensor principal acostumbran a ser de calidad. Buen rango dinámico, rescata las zonas de sombra sin ser agresivo en el contraste y el tratamiento del color tiende a ser natural; por más que acostumbre a subir la calidez de la temperatura cuando en la escena predominan los rojos y amarillos (con cierta saturación de dichos colores).

En la foto superior se aprecia el gran trabajo que llevan a cabo el sensor principal y la NPU MariSilicon X: muy buen rango dinámico durante una escena de atardecer y con luz reducida, buen tratamiento a las sombras y un excelente nivel de detalle, aplicando zoom a la imagen.

De noche las imágenes pierden calidad y ganan acuarelas, visibles con algo de zoom. El OPPO Reno8 Pro incluye un modo foto que echa mucho de menos el OIS en la cámara principal: dado que carece de estabilización mecánica, no resulta posible aprovechar la larga exposición que sí permitiría el OIS. Debido a eso, las tomas pueden salir algo oscuras, incluso con ligera trepidación; con un balance de blancos que no equilibra la temperatura habitualmente cálida de las luces urbanas.

Además

Foto superior tomada con la cámara principal y en modo noche. La pérdida de detalle se nota a simple vista, también la falta de efectividad en el equilibrio del balance de blancos: la iluminación es demasiado cálida.

El gran angular aporta cierta debilidad a la consistencia que sí ofrece la cámara primaria. Las tomas con el objetivo amplio pecan de notable pérdida de detalle, incluso durante el día (se aprecia con hacer algo de zoom). El procesado tiende a subexponer la toma y no logra un rango dinámico tan bueno como su hermano mayor. La deformación en los bordes de la imagen también es apreciable.

La foto de arriba está tomada con la cámara gran angular durante la tarde y con abundante luz. El rango dinámico se ve afectado, por lo que las zonas de sombra no terminan de definirse. Además, las acuarelas se perciben claramente en dichas zonas, también en el área más iluminada: el sensor no logra capturar suficiente detalle.

Además

La aplicación de cámara incluida con el OPPO Reno8 Pro se mantiene a buen nivel, tanto en funciones como en efectividad. Aparte de las tomas automáticas, del HDR y de la identificación de escenas mediante IA, el móvil puede sacar fotos con los 50 megapíxeles del sensor (las imágenes no mejoran a costa de triplicar el tamaño), incluye modo retrato (el recorte y el bokeh están a buen nivel), hace gala de modo noche, permite realizar fotografías en modo Pro y con ajuste manual de todos los valores de captura (no ofrece guardado en RAW), incluye captura macro (muy mejorable), dispone de toma panorámica y ofrece opción a nivel en pantalla (muy práctico), también histograma en el modo Pro. El zoom, siempre digital, va de los 2x a los 20x. Mejor usarlo lo menos posible.

La cámara frontal mantiene el tipo en la mayor parte de situaciones, incluso en interiores. Tiende a la sobrexposición, mantiene el nivel de detalle y el modo retrato que ofrece es de buena calidad (con un desenfoque muy marcado que no puede ajustarse en apertura). Los tonos cálidos tienden a hacerse dominantes.

A continuación tienes una muestra de fotografías y vídeos tomados con el OPPO Reno 8 Pro. Si quieres ver las imágenes en su tamaño original, puedes acceder a esta galería de Google Fotos.

OPPO Reno8 Pro, la opinión de Xataka

No podemos decir que pase desapercibido, es un teléfono concebido para llamar la atención. Y sin que ello implique la pérdida de elegancia o de exquisitez: la combinación de materiales premium, el diseño arriesgado y los colores elegidos dan una excelente sensación en mano y a la vista. En cuanto al gigantesco módulo fotográfico trasero… Pues es cuestión de gustos, nosotros lo hemos encontrado atractivo (y cargado de carisma).

Además

Es imposible no llamar la atención al levantar el OPPO Reno8 Pro para hacer una foto: todas las miradas se clavan en el gigantesco módulo fotográfico
El OPPO Reno8 Pro es un gama alta con todas las de la ley. Apenas pegas en cuanto a rendimiento, pantalla, sonido o autonomía: su notable alto de media hace que elegirlo sea una decisión acertada. Además, tener el móvil completamente cargado en media hora supone separarse de los dolores de cabeza esperando a que la batería reviva.

El rendimiento fotográfico es muy bueno, pero se echa en falta estabilización OIS en el sensor principal y un telefoto (en un móvil de 800 euros no debería de incluirse un sensor macro como tercera cámara). El gran angular necesita alguna mejora, también la captura en determinadas situaciones nocturnas. Por contra, el chip MariSilicon X logra notable naturalidad en el procesado de color si hay existe luz, también el detalle suele ser alto en estas situaciones.

Por los 799 euros que cuesta, el OPPO Reno8 Pro no nos parece una mala recomendación: es muy difícil que no haga las delicias de sus afortunados poseedores. Lástima que OPPO se quede a escasa distancia de convertir el teléfono en un auténtico aspirante al trono de la gama alta: le falta un empujoncito en esos detalles que realmente hacen valer el precio.

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