Mi router se cuelga a cada rato: qué puedo hacer
Mi router se cuelga a cada rato qué puedo hacer. Suele ser frecuente estar navegando por Internet, realizando una serie de actividades y notar que algo anda mal. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
De repente notamos que la conexión tiene algún tipo de problema (ya sea por cable o inalámbrica) y el router se ha quedado pillado, colgado, bloqueado, congelado o como lo queramos llamar. ¿Qué sucede y qué causas pueden llevar a ello?
Hay una multitud de causas que pueden provocar que el router se cuelgue, y analizando cada una podemos dar con sus posibles soluciones.
Número de dispositivos conectados
Si bien los router tienen un número determinado de puertos para conectar dispositivos por cable (aunque se pueden ramificar), el número de aparatos inalámbricos es aparentemente infinito… hasta que el router no puede gestionar correctamente cada conexión y acaba operando en plan «todas las conexiones o ninguna«, lo que deja sin servicio y produce esos cuelgues.
Sobre el papel, un router o punto de acceso doméstico puede llegar a soportar hasta 254 dispositivos conectados de manera simultánea por las propias limitaciones de las direcciones IP que puede asignar (desde la 192.168.1.0 hasta la 192.168.1.255).
Cada vez conectamos más aparatos del internet de las cosas.
En la práctica, dependerá del ancho de banda que consume cada aparato conectado. No es lo mismo unas bombillas LED o un enchufe inteligente que un ordenador o una Smart TV. Reiniciar el router puede ser la solución más simple, ya que puede arreglar cualquier pequeño fallo que nos esté dejando sin conexión y reinicia las solicitudes de conexión de todos los aparatos.
Algunos todavía intentarán conectarse al WiFi según vuelva a estar disponible, pero otros de fondo puede que necesiten hacerlo de forma activa cuando los volvamos a usar. Puedes incluso ajustar este número máximo de aparatos conectados al mismo tiempo en la configuración del router.
Uso de programas P2P
Entre los muchos usos que se pueden dar a Internet, el de programas P2P o de intercambio de torrents son algunos de los más demandantes para nuestro enrutador.
El router sufre cuando en cada PC hay un cliente P2P que abre bastantes conexiones simultaneas con el fin de conseguir mayor velocidad de descarga. Cada conexión establecida por algún equipo es almacenada por el router en una tabla (NAT y PAT) y llega un momento en que simplemente se congela, no quedando otra opción que resetearlo, para que dicha tabla se limpie.
Sobrecalentamiento del router
Aunque el router se calienta de forma natural por su propio uso prácticamente constante, cuando la temperatura se eleva más de la cuenta afecta al rendimiento. Cuando el router alcanza una temperatura muy alta, puede causar microcortes, pérdida de velocidad de Internet e incluso pérdidas de conexión momentánea o incluso permanente hasta que apagamos el aparato.
Colocar el router en una zona más ventilada como solución a largo plazo o dejarlo apagado durante un rato para que se enfríe pueden ser soluciones que eliminen el problema de que el router se congele debido a su excesivo calor.
Firmware o router obsoleto
En ocasiones, tener un aparato obsoleto, ya sea el router en sí o su firmware, puede traducirse en tener un problema a la hora de gestionar los recursos del router, o incluso permitir alguna vulnerabilidad o malware.
Descargar e instalar la última versión del firmware, en caso de no tener actualizaciones automáticas, y de paso restableceremos las configuraciones a sus valores de fábrica podría resolver el problema.
Configuración de seguridad
Relacionado con lo anterior, en ocasiones será el propio router el que se bloquee para no ponerse en riesgo. Dentro de las opciones de configuración encontraremos algunas relacionadas con seguridad.
Deberías comprobar que no tienes activado algún tipo de firewall que esté provocando algún conflicto y evitando que los dispositivos puedan conectarse correctamente.