Hay pocas maneras mejores de cerrar una temporada de nueve meses y 78 partidos que ganando el título de Liga en casa del eterno rival. Si además ese título es el cuarto de la temporada y te permite conquistar un ‘triplete’ que tu club no conseguía desde hacía 41 años, el final es de película. El Real Madrid ha cerrado una temporada histórica en la que ha sido muy superior a todos sus rivales, algo que ha dejado muy claro en la final contra el FC Barcelona. Justo la temporada en la que el Barça de fútbol lo gana todo, el equipo de baloncesto se queda en blanco (algo que no sucedía desde la 2007-2008) y el Madrid recuerda tiempos que ya tenía olvidados.

El último equipo del Real Madrid que ganó Liga, Copa y Copa de Europa (la Supercopa se disputa desde 2004) estaba entrenado por Pedro Ferrándiz y formado por Vicente Ramos, Carmelo Cabrera, Juan Antonio Corbalán, Luis María Prada, Cristóbal Rodríguez, Vicente Paniagua, Rafa Rullán, Wayne Brabender, Clifford Luyk y Walter Szczerbiak, que sólo jugaba en competición europea. Ese equipo venció en 1974 en Nantes al Ignis Varese de Dino Meneghin por 84-82.

Imagen de la plantilla del Real Madrid en la temporada 1973-1974 (Foto: Real Madrid)

Ganar cualquier título es muy complicado (algo menos si eres Madrid o Barça), pero es la Copa de Europa el título que desbloquea el ‘triplete’, algo en lo que coinciden Corbalán y Cabrera. Ganarla el mes pasado ha permitido a este Real Madrid entrar en la historia ahora. «Es el más complicado con diferencia», dice Corbalán, que fue decisivo en la final de 1974. Jugó los últimos dos minutos y medio tras la eliminación por faltas de Cabrera y anotó los últimos cuatro tiros libres, vitales para que el Madrid ganara su quinta Copa de Europa. «Ferrándiz se la juega y pone a Juanito Corbalán y mete los cuatro puntos de tiro libre, con una frialdad enorme. Ahí es cuando se destapa con el Madrid», recuerda Cabrera.

«Pero el que de verdad hizo un partidazo fue Cabrera. Salió a mitad de la primera parte y fue el mejor», apunta Corbalán. El base canario anotó 16 puntos, sólo por detrás de Brabender, que anotó 22.

Aquel título europeo se sumó a los dos trofeos nacionales de aquella temporada. En la Liga, el Madrid se mantuvo invicto (27 victorias y un empate en 28 partidos) y acabó por delante del Barcelona y el Joventut, al que ganó en la final de Copa jugada en Alicante por 87-85. Un dato deja clara la superioridad aquel Real Madrid de Pedro Ferrándiz en la década de los 70: ganó 9 de 10 ligas posibles y 7 Copas. Sumó siete dobletes, pero sólo un ‘triplete’. Por eso lo conseguido esta temporada es tan importante. «Está ganando con mucha contundencia en un baloncesto más competitivo. En los 70 había mucha diferencia del primero al segundo. Ahora son impensables las diferencias que había entonces», dice Cabrera.

Una temporada perfecta

«Es el mejor perímetro que yo he visto en ningún equipo», afirma Corbalán cuando se le pregunta su opinión por el Madrid de Pablo Laso. «Ya es mejor que el de nuestra época», dice su compañero en el puesto de base durante casi una década. Los dos vivieron la mejor época de la sección y formaron parte de un equipo que casi no tenía rival. Ahora, 40 años más tarde, han vuelto a disfrutar, como espectadores, de algo muy parecido. El Madrid ha confirmado esta temporada lo que le había costado rematar en los últimos años años: que es el mejor equipo de Europa.

La que ha terminado este miércoles en el Palau Blaugrana ha sido la mejor temporada de la historia del Real Madrid, no sólo porque ha ganado los cuatro títulos oficiales que ha disputado (Supercopa, Copa del Rey, Euroliga y ACB), sino porque también ha conseguido algo que ningún otro equipo español había hecho antes: ganar los títulos en las tres categorías de formación en las que se disputan campeonatos de España (infantil, cadete y júnior). A eso hay que sumar también el título europeo júnior. Una temporada perfecta.

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