La Venta de la Bandera del Ecuador: Resumen corto
La Venta de la Bandera del Ecuador: Resumen corto. Resumen corto sobre la venta de la bandera ecuatoriana en el gobierno de Luis Cordero.
Este episodio dentro de la historia ecuatoriana los historiadores lo han calificado como un accionar lamentable dentro de la vida política y diplomática del país.
Asimismo, ha sido considerado como una de las gotas que colmó el vaso del denominado “periodo progresista”, que representó una especie de conservadurismo light, después del gobierno de García Moreno (1875-1895).
Con el escándalo de la venta de la bandera, a finales de 1894, se le dio el impulso principal a la conocida Revolución liberal liderada por Eloy Alfaro, para así este instituirse como presidente del Ecuador en los próximos años.
¿En qué consistió el episodio conocido como “La venta de la Bandera” en el gobierno de Luis Cordero?
En el mes de noviembre de 1894 se desarrolló todo un escándalo político en Ecuador, cuando se supo que el buque Esmeralda, embarcación que fue supuestamente comprada por Ecuador para equiparar su armada, viajaba rumbo a Japón con otra bandera para sumarse a la flota nipona en su lucha contra China.
En gobierno ecuatoriano, según algunos testimonios, habría pagado 220 mil libras esterlinas por el buque, que posteriormente sería vendido a japón por un precio de 300 mil libras esterlinas, en cuanto a la diferencia de dinero, esta llega a desaparecer en las manos de los intermediarios.
A partir del descontento popular por el uso de la bandera ecuatoriana para eludir la neutralidad chilena en el conflicto, se inicia una revuelta el 5 de junio de 1895, la cual contribuyó a que terminara el gobierno del entonces presidente Luis Cordero y así se instala un gobierno liberal a mando de Eloy Alfaro. En el tiempo que duró esta revuelta fueron asesinados decenas de ecuatorianos.
La trata llevada a cabo en 1894 donde se negoció la compra de un barco al gobierno de Chile por parte de las autoridades ecuatorianas, para posteriormente venderlo al gobierno japonés por una suma mayor. Este actuar, muy conveniente para Japón, se desarrolló en el marco de una guerra de este país contra China, donde países como Chile tenían un pacto de neutralidad, razón por la cual no podía mercar con Japón un navío destinado a fines bélicos. Es así que el “trabajo sucio” correría a cargo de Ecuador, mientras que la banca norteamericana facilitaría los fondos para adquirir la embarcación.
Hay que agregar también que los gobernantes en dicha época eran un grupo oligárquico catalogado como “La Argolla”. El entonces presidente Luis Cordero, con conocimiento de toda esta operación, autorizó que el navío Esmeraldas con la bandera ecuatoriana izada fuera traspasado a Japón, por lo que la bandera se transformó en un simple trapo. Este hecho despertó el repudio y la furia de la sociedad ecuatoriana, además de que la protesta social fue incontenible, donde Eloy Alfaro llamó a la insurrección.
En este sentido, el régimen intentó acallar las protestas con fusilería. También en la ciudad de Quito el entonces Ministro de Guerra ordenó al Cuerpo de Artillería que tiraran a matar contra los manifestantes. Muchos heridos y muertos quedaron desplegados por el territorio nacional, sin embargo cayó el gobierno de Luis Cordero, ante una defensa cabal de la Bandera Nacional.