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Tenemos una joven generación de niños que ha crecido en la era digital, están acostumbrados a obtener todo de Internet y sus teléfonos. Para mantenerlos comprometidos, tenemos que pensar con originalidad y encontrar formas nuevas y emocionantes de inculcar la cultura a nuestros jóvenes.

Formas creativas de inculcar la cultura
A algunas personas les puede parecer que nuestros hijos no tienen ningún interés en aprender sobre el pasado. Sin embargo, eso no podría estar más lejos de la realidad. Sólo necesitan algunas formas creativas de inculcar la cultura a sus jóvenes. Afortunadamente, hay muchas maneras de hacerlo. El siguiente artículo explora algunas de esas formas y cómo puede empezar a aplicarlas en su propia familia.

La lectura es la clave

Una forma de ayudar a tus hijos a aprender sobre el pasado es la lectura. Leer libros de historia o biografías sobre personajes históricos puede ayudarles a comprender el contexto de la sociedad y la época en la que viven. La lectura también les ayuda a desarrollar el amor por la historia y les infunde un sentimiento de asombro y autonomía al aprender sobre ellos mismos y sus antepasados.

Abogue por la lectura con sus hijos, ya sea leyéndoles o haciéndoles leer por su cuenta. Si tienes hijos mayores, léeles en voz alta mientras hacen las tareas de la casa o viceversa. La lectura es la clave para despertar el interés de su hijo por la cultura.

Enseñar haciendo

Una de las mejores maneras de enseñar cultura es haciendo. Por ejemplo, si estás enseñando sobre la Revolución Americana y quieres que tus hijos puedan experimentarla por sí mismos, organiza una fiesta del té. Durante este evento, habla de cómo era la vida en América durante la revolución y haz que se disfracen con trajes apropiados para la época.

Otra forma de enseñar haciendo es mediante actividades prácticas. Puedes hacerlo con casi cualquier tema, pero es una forma estupenda de mostrar cómo se hacían las cosas en aquella época sin entrar en demasiados detalles. Puede que no te des cuenta, pero tu hijo recordará estas experiencias más que cualquier lección que le hayas enseñado.

Contar historias

Una de las mejores maneras de hacer que la historia cobre vida para los niños es contarles historias. Esto puede hacerse de muchas maneras. Una de ellas es a través de libros de cuentos, que puedes crear tú mismo o encontrar en una biblioteca o librería. Tus propias historias personales también son un buen punto de partida. Hay muchas personas que tienen fantásticas historias familiares que les encanta compartir con sus hijos y nietos.

La otra gran ventaja de contar historias es que no lleva mucho tiempo y no se necesita ningún equipo o material costoso. Sólo necesitas tu imaginación y un público dispuesto. Además, tiene la ventaja añadida de ser interactivo, por lo que los niños se mantendrán interesados durante más tiempo que si sólo se les cuenta algo sin involucrarlos.

Los cuentos pueden contarse en distintos contextos, como alrededor de la mesa o sentados en el sofá antes de dormir. Si tienes más de un hijo, contar cuentos es una forma estupenda de involucrarlos también porque permite una atención individual y permite que cada niño se imagine a sí mismo como parte de la historia.

Hacer música

¿Le interesa la música a su hijo? Si es así, haz que forme parte de su vida. No sólo aprenderá a tocar un instrumento, sino también la historia y la cultura que lo acompañan. Por ejemplo, los que tocan la guitarra pueden estudiar la historia del rock n’ roll o del jazz. Los que tocan la batería pueden estudiar los tambores africanos. Hacer que la música forme parte de su vida les ayudará a desarrollar un aprecio por todos los tipos de música. Incluso puedes utilizarla como una forma de enseñarles otras culturas.

Si te preocupa que tu hijo no tenga ningún talento musical, ¡no te preocupes! Hay muchas maneras de hacer que se involucren sin que se sientan presionados a tener éxito. Puede recibir clases de un amigo de la familia o incluso apuntarse a clases si hay alguna disponible en su centro comunitario local. Esto les mantendrá ocupados mientras aprenden algo nuevo e interesante.

Instale arte en su casa

En la era de las pantallas, a menudo es difícil encontrar la manera de hacer que la gente se detenga a ver lo que tienes que ofrecer. Sin embargo, hay formas de asegurarse de que la gente se fija en lo que le rodea. Una de ellas es instalar obras de arte en tu casa.

Un buen lugar para empezar con esta idea son las paredes de tu casa o apartamento. Esto requerirá un poco más de creatividad que colgar unos marcos normales en la pared, ya que hay muchos estilos y tipos de arte diferentes entre los que puedes elegir. Ten en cuenta que los lienzos no suelen ser recomendables para usarlos en las paredes porque se estiran, se deforman y se caen de la pared después de estar colgados menos de un mes, pero pueden funcionar bien como piezas en una habitación en la que no estén sometidos a un contacto constante.

Si buscas formas de incorporar el arte a tu casa sin tener que preocuparte por la frecuencia con la que habrá que reencuadrar o pintar, prueba a buscar un artista especializado en arte de instalación, como mosaicos, instalaciones con materiales de desecho o cualquier otra cosa que requiera que alguien con experiencia monte una pieza de instalación sin necesidad de enmarcarla.

Otra opción es coleccionar y exponer parafernalia de época, como tarjetas postales, mapas, pósters y libros; este tipo de cosas no suelen necesitar ningún tipo de reencuadre.

Intenta una búsqueda del tesoro

¿Tiene un niño al que le encanta explorar? Si es así, ¡intente una búsqueda del tesoro!

Cuando mi hija era más pequeña, nada le gustaba más que encontrar tesoros escondidos. Hace poco se me ocurrió una forma de mantener vivo ese interés. Le dije que íbamos a hacer una búsqueda del tesoro y que el primero que encontrara un objeto se lo llevaría a casa. Se entusiasmó de inmediato y quiso saber qué suerte le esperaba.

Le expliqué que los objetos podían ser libros, joyas, ropa, juguetes y cualquier otra cosa que pudiera imaginar. No veía la hora de empezar.

Recorrimos la casa buscando cosas que pudieran considerarse tesoros. Una vez que terminamos, salimos juntos a la caza. Fue increíble la rapidez con la que encontró cosas en las que yo no había pensado. Nos divertimos explorando la casa juntas y ella parecía ansiosa por compartir sus descubrimientos conmigo. Pienso volver a hacerlo pronto. Formas creativas de inculcar la cultura.

Enseñar una habilidad

Enseñar una habilidad es una excelente manera de informar a los niños sobre la rica cultura de nuestra sociedad. Aprender una habilidad es valioso y puede enseñarse de muchas maneras. Una forma creativa de enseñar a tu hijo el legado que dejaron las generaciones anteriores es enseñarle a coser o a tejer. No sólo estarás informando a tu hijo de la importancia de la artesanía, sino que también adquirirá una valiosa habilidad que podrá llevar consigo de por vida.(IA)