“Sería duro y fuerte que se fuera Ancelotti”. James Rodríguez, al término del último partido de Liga, fue el primero que puso voz al vestuario. El canterano Nacho, poco después, afirmó contundentemente que “Ancelotti es entrenador para el Real Madrid. Merece seguir”. El más mediático de todos, Cristiano Ronaldo, lo hizo a través de las redes sociales: “Gran entrenador y estupenda persona. Espero que trabajemos juntos la próxima temporada”. Antes, el Santiago Bernabéu con un gesto cercano a la ovación, envió un mensaje a Florentino Pérez y su directiva sobre cuál es su postura acerca del entrenador.

Al principio fueron las encuestas realizadas en diferentes medios de comunicación las que apartaban a Carlo Ancelotti como responsable del año en blanco. Este sábado, en el último partido de la temporada –ganado con contundencia por 7-3 frente al Getafe– habló el pueblo y los gladiadores. Ahora le toca decidir al ‘César’, quien parece tener claro que debe echar a Carlo ‘a los leones’…

 

 

Florentino Pérez y su directiva tienen planeado comunicar entre lunes y martes de manera oficial a Carlo Ancelotti y su representante, Enzo Broncetti, que no continuará para la próxima campaña, en cuyo caso el italiano se tomará un año sabático tras sus palabras de este sábado.

El vestuario y la afición no son soberano

El vestuario y la afición del Santiago Bernabéu no son soberanos -de lo contrario, Ancelotti continuaría-, pero sí protagonistas del devenir del Real Madrid: unos en el césped y otros, los que votan, en el palco… aunque las próximas elecciones son en 2017 y hay dos temporadas por medio para que la pelota entre y sumen más títulos que los cuatro logrados en dos años por Ancelotti.

Bajo el mandato de Florentino Pérez, a los entrenadores que no han ganado ningún título no les ha dado continuidad y Ancelotti no será una excepción pese a las circunstancias anteriormente comentadas o que hace seis meses señalara: “Quiero que Carlo sea el Alex Ferguson del Madrid”. Ferguson, en más de una ocasión, se marchó de vacío en alguna temporada.

“El club está pensando para tomar la decisión justa y yo estoy esperando”. Carlo apelaba a lo que es justo o no, aunque él mismo, en la misma rueda de prensa de este sábado, indicó que el ser despedido “son cosas que pasan en el fútbol. No pasa nada”. Quizás en el Madrid sí, para bien o para mal. Él mismo lo comprobará el año que viene, seguramente en el sofá de su actual casa, desde donde se ve la Puerta de Alcalá.

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