Autoridades de Sri Lanka fueron advertidas de atentados días antes

El gobierno de Sri Lanka decretó el estado de emergencia a partir de la medianoche (tiempo local) de este lunes 22 de abril del 2019, después de haber atribuido a un movimiento islamista local, el National Thowheet Jama’ath (NTJ), la autoría de la ola de atentados suicidas del domingo, cuyo balance se elevó a 290 muertos y 500 heridos.

El ministro de Salud, Rajtha Senraratne, que ejerce de portavoz del Ejecutivo, se tomó su tiempo cuando, al ser preguntado en una rueda de prensa en Colombo sobre qué grupo estaba detrás de los atentados. Añadió que no saben si este grupo tiene vínculos con el exterior.

No obstante, Senraratne indicó que las investigaciones apuntan a que los devastadores ataques pudieron ser planificados con la ayuda de una red internacional, teniendo en cuenta el entrenamiento de los atacantes y el uso de potentes explosivos.

«No creemos que una organización pequeña de este país pueda hacer todo esto. Estamos investigando el apoyo internacional y otros vínculos», dijo el ministro, al tiempo que se preguntó: «¿cómo se formaron los atacantes suicidas? ¿cómo se produjeron bombas como esas?».

El NJT se dio a conocer en 2018 por actos de vandalismo contra estatuas búdicas.

El ministro srilanqués de Salud, Rajtha Senraratne, ofrece una rueda de prensa en Colombo. Foto: EFE

El funcionarioreconoció también que el pasado 4 de abril Sri Lanka había recibido información de agencias de inteligencia internacionales avisando de estos ataques, en los que se decía que los objetivos podrían ser «iglesias y destinos turísticos».

«Se informó al inspector general de la Policía el 9 de abril, incluyendo los nombres de supuestos terroristas», reconoció, subrayando la responsabilidad del Gobierno en lo sucedido por no haber evitado la tragedia.

«Que lo supiéramos o no es otro asunto, pero somos responsables, lo sentimos mucho y pedimos disculpas», remarcó.

El portavoz anunció 1 millón de rupias (unos 5.000 euros) para las familias de los fallecidos, entre 100.000 y 30.000 rupias (entre 500 y 1.500 euros) para los heridos y la «inmediata reparación de las iglesias con la ayuda de las fuerzas de seguridad».

Al momento, unos 24 sospechosos han sido detenidos por estos ataques, que a pesar de que el Gobierno los relacionó con el NTJ, aún no han sido reivindicados.

Multimillonario danés pierde tres hijos en atentados

Entre las víctimas hay al menos 32 extranjeros de más de siete nacionalidades. Entre ellos, tres de los cuatro hijos del multimillonario danés Anders Holch Povlsen, dueño del grupo de moda Bestseller y principal accionista de la marca de venta en internet ASOS.

Según los medios de prensa daneses, Anders Holch Povlsen, su esposa Anne Holch Povlsen y sus cuatro hijos se encontraban de vacaciones en Sri Lanka.

Atentados de esta magnitud no habían tenido lugar en Sri Lanka desde la guerra civil entre la guerrilla tamil y el Gobierno, un conflicto que duró 26 años y finalizó en 2009, y que dejó, según datos de la ONU, más de 40.000 civiles muertos.