8 años de guerra en Siria

Hoy se cumplen ocho años de la guerra de Siria, un conflicto que ya dura más que la Segunda Guerra Mundial y que provocó la huida de más de la mitad de su población.

Actualmente, hay 5,6 millones de refugiados sirios en el mundo, además de 6,2 millones de desplazados en el interior del país (2,5 millones de ellos niños).

Esto supone el mayor desplazamiento en el planeta y en una nación en la que vivían 22 millones de personas antes de la guerra, según la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

Otra cifra que muestra la gravedad de esta situación son los 367.965 muertos que documentó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos desde que se inició la guerra hasta diciembre de 2018, de los cuales 111.330 son civiles, incluidos 20.819 menores de edad.

La infancia es siempre el colectivo más vulnerable en un combate. En Siria, 4 millones de niños y niñas solo conocen la guerra. Lo único que han visto es violencia, violencia y más violencia.

Muchos han tenido que huir de sus hogares, vivir en el terror y perder su derecho a la educación, señala la ONG Save the Children.

Solo en 2018, según el Fondo de las Naciones Unidaspara la Infancia (Unicef), 1.106 niños murieron en Siria, en el año más mortífero para los más pequeños.

El 15 de marzo de 2011, una llama prendió en las calles de las principales ciudades de Siria para demandar, entre otras consignas, la salida del presidente, Bachar al Asad, siguiendo la estela de otros países de la región en el marco de la denominada “Primavera Árabe” contra los líderes autoritarios.

Pero la revuelta popular degeneró en un conflicto armado. Se formaron cientos de brigadas rebeldes, que cuentan con el apoyo de una coalición internacional liderada por EE.UU., para combatir a las fuerzas del gobierno y controlar los poblados.

En el octavo aniversario de esta guerra, Al Asad en el poder desde 2000, mantiene el control en varias localidades, gracias en parte al apoyo de Rusia, su aliado. (I)