14 ecuatorianas en silla de ruedas se postulan a un reinado de belleza

Una larga cicatriz recorre su espalda. La marca es producto de un accidente de tránsito ocurrido en Tena (Napo), hace un lustro.

Sara Llulluna, de 30 años, no oculta las huellas de las múltiples cirugías a las que se ha sometido. Usa vestidos que dejan al descubierto su parte posterior. Ella fue una de las pocas sobrevivientes. Tuvo una segunda oportunidad para vivir, pero en una silla de ruedas.

Su nueva condición no la detuvo. Regresó a la universidad tras un coma inducido, se graduó de ingeniera en ecoturismo y volvió a trasladarse en carro.

Hoy Sara tiene un nuevo reto: ganar el Miss Wheelchair. Quiere convertirse en la primera reina en silla de ruedas de Ecuador. Ella viajó desde Tena hasta Guayaquil para presentarse en el Salón de la Ciudad porque es parte de las 14 candidatas que provienen de la Costa, Sierra y Amazonía. Todas usan silla de ruedas.

Sara lució este jueves 14 de noviembre de 2019 un vestido de flores. Lo combinó con aretes rojos y zapatos de plataforma café. Los puso sobre el reposapiés de la silla. Unas, para participar, se inscribieron en la página web del certamen. Otras fueron seleccionadas en sus ciudades por un equipo de producción de los organizadores.

El Salón de la Ciudad fue copado por mujeres que, para las fotos, se retocaban el rostro y el cabello. Allí regularmente solo se discuten temas políticos. Los diseñadores se movieron de un lado a otro para dejar impecables a las competidoras, que tienen entre 22 y 50 años.

Carolina Figueroa, directora del certamen, explicó que la intención es empoderar a la mujer con discapacidad física. “Detrás de una silla hay vida y sueños”.

La mayoría de las aspirantes son profesionales. Hay médicas, abogadas, ingenieras y deportistas. Por ejemplo, Carolina Lasso, de 44 años, es tenista y cantante; Ana Amores, de 43 años, veterinaria; Roxy Rivadeneira, de 26, abogada, y así hay otras más.

Justamente, a ellas las movió participar en la visibilización del colectivo. Carolina anhela que, después de este grupo, vengan más mujeres y se sientan seguras de su belleza. Ana ve en el certamen una oportunidad para demostrar que son luchadoras.

Sara también tiene un propósito: demostrar que el colectivo posee habilidades extraordinarias, como cualquier otra persona. “Nuestra discapacidad no define nuestra forma de ser ante la sociedad”.

Un deseo similar tienen María Rivadeneira (35 años), Jénnifer Guillén (28), Verónica Villacís (35), Teresa Alvarado (50), JénniferUlloa (22), Silvia Macías (39), Ángela Mena (48), Salomé Serrano (24), Isabel Escobar (43) y Diana Lara (35).

El día de la elección (3 de diciembre) Sara y las demás candidatas presentarán una coreografía, responderán preguntas y desfilarán con tres trajes distintos. El último, como en todos los certámenes, será el de gala, creado por un diseñador.

Este jueves 14 de noviembre de 2019 a Sara le tomaron las medidas para confeccionarlo. La noche en la que lo luzca coincidirá con el Día Mundial de las Personas con Discapacidad. La electa representará al país en el Miss Wheelchair, en Francia. (I)