Tinder es peligroso. Según los últimos datos que presenta la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 10% de la población española utiliza actualmente una aplicación o web de citas y el 21% la ha utilizado en alguna ocasión. Con un incremento sobre todo a raíz de pandemia, estas apps se han convertido también en un nido de estafadores o timadores que utilizan estas herramientas para fines delictivos de todo tipo y no precisamente para robarte el corazón. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram  ingresa al siguiente enlace.

Los peligros de las apps de citas

Aunque en los últimos días se ha hablado bastante de Tinder por el caso de Benidorm, donde se detuvo a un hombre acusado de un fraude de una cantidad superior a 20.000 euros, hay otros tantos peligros en el uso de estas apps de citas.

Uno de los ejemplos más frecuentes, según un informe de Kaspersky, es el uso de perfiles falsos. A pesar de que las herramientas como Tinder han incluido una serie de fases de verificación, junto a un sello que aumente la confianza de que un perfil es realmente verdadero, el 52% de las estadas en este tipo de apps son casos de catfishing. Es recomendable utilizar aplicaciones como Tineye.com o Google Images para comprobar que las imágenes de la persona con la que hablamos son reales o al menos verificar que no corresponden a un perfil falso.

A partir de estos perfiles falsos, se pueden desarrollar todo tipo de comportamientos delictivos. Lo más común, tal y como en el caso que mencionábamos antes, es que, tras conseguir engatusar a su víctima con perfiles altamente atractivos o mediante comportamientos de lo más encantadores, surja algún tipo de situación que provoque que el delincuente pida dinero a la víctima. Aquí los casos pueden ser de múltiples naturalezas: emergencias familiares, problemas sanitarios, vuelos en caso de no encontrarse en el mismo lugar, falsas donaciones a organizaciones benéficas, etc. Evidentemente, una vez que reciban tu dinero, seguramente desaparecerán instantáneamente.

El uso de estas aplicaciones requiere en la mayoría de los casos de acceso al GPS para encontrar perfiles cercanos a los tuyos. En algunas se puede simplemente establecer manualmente la localidad, sin necesidad de aportar datos más específicos. En cambio, en otras directamente se hace uso del geoposicionamiento para saber dónde te encuentras con diferentes rangos de precisión.

Como los ciberdelincuentes puedes falsear las coordenadas del GPS mediante programas de terceros, puede ser utilizado por ellos “navegar” por el mapa y calcular las coordenadas aproximadas de la persona que les interesa.

Otro de los peligros que figuran en el informe de Kaspersky tiene que ver no tanto con la solicitud de dinero de forma directa, sino que una vez ganada tu confianza, te envían un enlace o archivo malicioso de la misma forma que sucede en estafas como smishing por SMS. Este tipo de peligro supone el 17% de las estafas en apps de citas.

Estos archivos o enlaces pueden robar datos personales sensibles, como cuentas bancarias, archivos personales, o conseguir contraseñas de todo tipo con la que más tarde puedan acceder a tus cuentas bancarias u otras como las de redes sociales por las que pueden pedir un rescate.

El podio de Kaspersky lo cierra con un 14% el robo de identidad. Ligado al primer caso, no solamente se trata de perfiles falsos, sino que directamente suplantan una identidad concreta para tratar de ganarse la confianza de las víctimas con intenciones maliciosas. Lógicamente, esto puede no solamente suponer un peligro para tu reputación en línea, sino que también podría involucrarte indirectamente en un delito que no has cometido.

Otro de los peligros deriva del sexting, el envío a través del teléfono móvil u otro dispositivo con cámara, fotografías o vídeos producidos por uno mismo con connotación sexual. Si llegan a las manos erróneas, puede dar lugar a una posterior sextorsión. Si esta práctica puede ser de riesgo, lo es más con desconocidos, que luego traten de chantajear de alguna forma.

A esto habría que sumar los peligros de la propia cita, en caso de darse. Los expertos recomiendan que, si hay cita, sea en un lugar público para aumentar la sensación de seguridad y que haya personas a tu alrededor que puedan echarte una mano si algo se pone feo.

Consejos para evitar estos peligros

La propia OCU ha ofrecido una serie de consejos para evitar este tipo de fraudes y estafas, cada vez más habituales a medida que van teniendo más éxito y aceptación este tipo de aplicaciones para ligar.

• Desconfiar de cualquier petición de dinero que se realicen bajo estas aplicaciones, así como cualquier sugerencia de inversión que habitualmente se presentan bajo unos elevados rendimientos.
• No facilitar nuestros datos en aplicaciones de citas, ni remitir documentación alguna. Algunas de las estafas se centran en la obtención de datos personales que aprovecharan nuestra identidad e información para contratar servicios o productos, usurpando nuestra identidad.
• Informar y reportar dentro de estas aplicaciones de perfiles o mensajes sospechosos para prevenir que otras personas puedan continuar interactuando con estos.

Si hemos caído en la trampa y accedido a algunas de estas estafas, OCU aconseja ponerse en contacto con tu entidad bancaria a la mayor brevedad e informando por escrito de lo sucedido para que puedan bloquear la tarjeta y las cuentas bancarias, así como proteger los saldos bancarios y tomar las medidas oportunas. Al mismo tiempo es recomendable denunciar los hechos ante las fuerzas de seguridad recogiendo con detalle todo lo sucedido.