Apple pagará royalties a discográficas y artistas durante los tres meses de prueba gratuita que dará a sus clientes del servicio Apple Music. Y ha sido una chica de 25 años quien ha logrado que lo haga. La cantante Taylor Swift publicó una carta abierta para la tecnológica en su página de Tumblr, en la que explicaba por qué no pondría su último álbum, 1989, a disposición de ser incluido en el catálogo de Apple.

«Seguro que ya sabéis que Apple Music ofrecerá tres meses de prueba gratuita para cualquiera que se inscriba en el servicio. Lo que no sé si sabéis es que no pagará a los autores, productores y artistas por esos tres meses. Me parece sorprendente, decepcionante y totalmente impropio de una compañía históricamente progresista y generosa.»

En su carta, titulada Para Apple con amor, Swift asegura no haber tomado esta decisión por sí misma («por suerte ya voy por mi quinto álbum y puedo mantenerme a mí, mi banda y mi equipo actuando en conciertos») sino por los nuevos grupos que lanzan sus primeros discos, los artistas que han presentado su primer éxito o los productores que trabajan para innovar y crear «igual que hacen los creadores de Apple que son pioneros en su campo… pero ellos no recibirán compensación durante un cuarto de año por sus canciones».

La rápida reacción de Apple

Lejos de ser obviada, la misiva de Taylor Swift ha sido tenida en cuenta y Apple ha decidido que pagará a los artistas también durante los tres meses de prueba que hasta ahora no reflejaban beneficios para las cuentas de los cantantes. «Apple pagará por el streaming, incluso durante los periodos de prueba», ha escrito Eddy Cue, vicepresidente de la compañía, en su cuenta de Twitter.

Por su parte, Taylor Swift se ha mostrado «agradecida y aliviada» tras las palabras de Cue, y ha querido dar gracias a sus seguidores, que han hecho una vez más de altavoz de sus palabras. «Gracias por vuestras palabras de apoyo hoy. Nos han escuchado», ha publicado en su perfil.. Según la cantante, su opinión sobre que Apple debería pagarles también durante los tres meses de prueba se extiende por círculos artísticos que comparte, aunque muchos «tienen miedo de decirlo en voz alta» por la «admiración y respeto» que tienen por la firma tecnológica.

La decisión de Apple de pagar a los artistas también durante el periodo de prueba coincide con el momento en que Spotify ha aumentado el porcentaje de usuarios que pagan por sus contenidos. Ahora, esta cifra supera el 26%. 

No es la primera vez que Swift alza la voz en contra de los servicios de streaming. A finales del año pasado, la cantante decidió retirar toda su discografía de Spotify. «La piratería, el compartir archivos y la reproducción inline han reducido la cantidad de ventas de álbumes drásticamente. La música es arte, y el arte es importante y raro. Las cosas importantes y raras son valiosas. Debería pagarse por las cosas valiosas. En mi opinión la música no debe ser gratuita», explicó en una columna para el Wall Street Journal. 

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