La Comisión de Jean-Claude Juncker continúa avanzando en su empeño de fortalecer la unión entre los Estados miembros. El Gobierno de la Unión Europea ha lanzado este miércoles su estrategia de dos años de mercado único digital en la que se pretende aumentar la interconectividad de los Veintiocho. Se trata de una agenda de 16 puntos en la que se ha hecho hincapié en la eliminación del bloqueo geográfico en Internet para permitir a un país mayor acceso a los contenidos de otro.
«Deseo ver una red de comunicación paneuropea con servicios digitales que crucen fronteras y que fomenten la aparición de pequeñas y medianas empresas digitales», declaró el presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, en un comunicado.
Competencia ha iniciado una investigación al sector del comercio electrónico por supuestas prácticas anticompetitivas
La estrategia —que según el comisario deberá aplicarse a finales de 2016— está basada en tres pilares fundamentales: un mejor acceso al mercado digital en el territorio comunitario, fomentar la innovación para que haya más competencia en el mercado y maximizar el crecimiento de la economía digital. La Comisión argumenta en su comunicado que en mundo offline no ocurre nada similar: “Un ciudadano no es rechazado en una tienda por no ser nacional de ese país”.
Los datos revelan la necesidad de una mayor facilidad a la hora de navegar sin fronteras: 315 millones de europeos utilizan Internet todos los días, según datos de la Comisión y uno de cada tres europeos quiere ver o escuchar contenido de su país de origen cuando está en el extranjero, y viceversa, explicó Ansip este miércoles tras la reunión del Colegio de comisarios. Y por eso esta Comisión se ha puesto como «prioridad» acabar con el bloqueo geográfico injustificado que, según el comisario, atañe a los derechos de autor y el comercio electrónico.
De hecho, la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, en su afán por eliminar cualquier traba fronteriza para los usuarios y compradores, ha iniciado este miércoles una investigación al sector del comercio electrónico por supuestas prácticas que, de confirmarse, irían en contra de las normas de competencia de los Estados miembro. La investigación —que fue anunciada el pasado marzo— se centrará en las empresas de ropa y calzado, electrónica y contenidos digitales.
El camino para la unión digital parece, pues, una de las prioridades de este Gobierno y, aunque el Ejecutivo comunitario tiene el apoyo de «la mayoría» de Estados miembros, aún quedan algunos a los que convencer. «La Democracia es Democracia», advirtió el comisario Günther Oettinger. El Parlamento y el Consejo deberán ahora trabajar juntos para seguir adelante con el proyecto.