El sueldo se redujo o peor aún desapareció con la pandemia para el 40 % de trabajadores. Los que siguen con empleo cuentan los días o los meses para recuperar el dinero que perdieron por los ajustes que la ley permitió a las empresas para que se sostengan en medio de la crisis sanitaria y económica.

Junio del 2020. Rocío tenía más de diez años enrolada en su empresa, tuvo que firmar un nuevo contrato por dos años, por seis horas diarias y 25 % menos de sueldo. Le dijeron que cuando la mala situación se solucionara podría pedir el reintegro a las ocho horas. Ella ya recuperó su pago completo porque tomaron en cuenta una condición médica, pero sus compañeros siguen a la espera de que mejoren los números de la empresa o que en seis meses se cumplan los dos años del nuevo contrato.

Cómo y qué gastos reducir para ajustar el sueldo a la crisis y empezar el 2021 con las cuentas ordenadas

Una encuesta realizada por la Universidad Tecnológica Empresarial de Guayaquil (UTEG) muestra la afectación que han tenido los ingresos desde marzo del 2020 –que se declaró el confinamiento y la emergencia sanitaria en el país– hasta la actualidad: El 21,41 % perdió su empleo; el 14,36 % recibió menos paga de lo habitual; el 3,25 % renunció. Estas tres consecuencias del COVID-19 suman 39,02 %. Y hay otras como que el 24,12 % tuvo que trabajar más horas de lo habitual y otro 12,20 % tuvo que trabajar desde otro lugar.

Y desde el inicio de la pandemia hasta ahora el 39,84 % dice que los ingresos recibidos del empleo o negocios de los miembros del hogar se redujeron: 25,75 % a la mitad; para el 7,59 % a menos de la mitad y al 6,50 % le queda más de la mitad. Ingresos de hogares cayeron.

La pérdida de ingresos fue global. Así lo reporta el Banco Mundial: todos los grupos de ingreso sufrieron pérdidas durante la pandemia, pero el 20 % más pobre tuvo la caída más pronunciada y en este 2021 el 40 % más pobre no ha comenzado a recuperarlas, mientras que los grupos de más ingresos ya empezaron a contener esa tendencia a la baja.

Para este organismo internacional.

La desigualdad en la recuperación se torna bastante evidente cuando se trata de las pérdidas de ingresos. Y los hombres y las mujeres han vivido la crisis de maneras muy diferentes. Un examen de datos realizado por el Banco y otros asociados muestra que las mujeres han sufrido mayores pérdidas que los hombres en términos de empleo, ingresos y seguridad.

La UTEG indica que “a pesar de la mayor flexibilidad de horarios, el teletrabajo hace más difícil definir de qué hora a qué hora trabajamos, pudiendo tener efectos negativos en nuestra salud mental y física, en ese escenario podemos ver que el 24,12 % de los encuestados debió trabajar más horas de lo habitual, seguido por el 21,41 % de personas que perdieron sus trabajos, es decir, el 45,53 % debió pasar efectos negativos tras la pandemia, solo el 18,43 % no tuvo ninguna modificación en su realidad laboral”.

También menciona un dato “de alta relevancia”:

El 50,68 % son hogares donde el hombre y la mujer contribuyen al sustento financiero, en el 32,25 % solo una persona y el resto tiene más de tres aportantes, según la encuesta realizada a 370 personas en Guayaquil. Aunque indica que las mujeres son las más afectadas por la sobrecarga de trabajo de cuidados no remunerados.

Esos cuidados y reducción de sueldo son algunas razones por las que el 18 % de ellas renunció en la pandemia, de acuerdo con un trabajo de la Organización y Promoción de la Economía Violeta (OPEV), el 48 % perdió el trabajo. Y de las que en la actualidad siguen sin empleo el 46 % está intentando trabajar en un emprendimiento, solo 27 % busca un trabajo y 26 % se dedica exclusivamente a tareas del hogar, dice la presidenta María José Zambrano, quien menciona otro aspecto que afecta a los ingresos: la brecha salarial que alcanza al 28,5 %, “significa que por cada dólar que está generando un hombre, nosotras estamos generando 71 centavos”. Ingresos de hogares cayeron.

Estos días se termina el mes y el año.

Y en enero unos 500.000 trabajadores cobrarán $ 25 más mensuales, por el alza salarial fijada por el Gobierno.

Quienes ganan salarios básicos de cada sector tendrán 6,25 % de aumento. Los que perciben más del básico y perdieron un porcentaje por la Ley de Apoyo Humanitario deben esperar unos meses más hasta retomar su sueldo. Otras empresas sí prevén alzas pequeñas por su cuenta. Por ejemplo, Deloitte realizó una investigación en la que participaron 130 empresas y el 58 % de las compañías ha proyectado incrementos en promedio de 3,23 % (3,56% las nacionales y 2,84 % las multinacionales). El 11 % de la muestra no realizará aumentos y el 31 % aún no define qué hará. En estas proyecciones los sectores con mayores alzas son los de salud (6 %), seguros (5,5 %) y financiero (3,9 %).

Un 80 % está en jornada mixta o presencial

Deloitte dice que el teletrabajo permitió implementar modelos híbridos de jornada laboral. Los resultados de su estudio a 130 empresas indican que el 46 % de estas menciona que mantiene una jornada mixta (es decir, la persona puede laborar unos días virtual y otros presencial), el 34 % de forma presencial y 18 % está en presencial o teletrabajo (se encuentran distribuidos según el área, cargo y/o nivel bajo presencialidad o teletrabajo) y solo el 2 % se encuentra laborando solo virtualmente.

Cargos que podrían desaparecer

La firma destaca el rediseño de las estructuras dentro del proceso de cambios y detalla los cargos considerados como críticos: líder de transformación digital, diseñador web e-marketing / e-commerce, ejecutivo de servicio al cliente, asesor comercial y especialista en seguridad de la información. Por otro lado, identifica posiciones que desaparecerán de las estructuras debido a la nueva dinámica de trabajo: auxiliares administrativos, servicios generales, de documentación, recepcionistas, asistentes de gerencia y mensajeros.

Nuevo enfoque para emprendimientos

Un 55,48 % de encuestados por la Universidad Tecnológica Eempresarial de Guayaquil no decidió emprender para hacer frente a la pandemia; analiza que es el grupo que mantuvo su empleo. La presidenta de Organización y Promoción de la Economía Violeta (OPEV), María José Zambrano, indica que estos no duran más de dos años y por eso se deben impulsar los emprendimientos, pero en lo innovador, en la economía digital, economía verde, circular. “No podemos seguir vinculándonos a actividades de manufactura, artesanales, porque hay una curva de crecimiento lento. Vamos por lo innovador y mirada global, no local.