Fundación de Ibarra 28 de septiembre de 1606
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La ciudad de San Miguel de Ibarra fue fundada el 28 de septiembre de 1606, por el capitán Cristóbal de Troya.
Todo bajo la orden del presidente de Quito, Miguel de Ibarra y el mandato del Rey Felipe de España. Está ciudad fue construida entre Quito y Pasto, cerca del mar, en el valle de los Caranquis.
Erigida con el nombre de Villa de San Miguel de Ibarra, en homenaje al presidente que ordenó su fundación.
Durante los primeros años de la colonia logró convertirse en una de las principales de la Real Audiencia de Quito y cabecera del Corregimiento de su mismo nombre.
Además agrupaba a las parcialidades de Tulcán, Huaca, Tusa, Mira, Puntal (hoy Bolívar), Pimampiro, San Antonio de Caranqui, Salinas, Tumbapiro, Quilca y Caguas.
Finalmente, el 11 de noviembre de 1811 fue elevada a la categoría de ciudad.
García Hurtado de Mendoza, Marqués de Cañete precursor de la fundación de Ibarra
Dicho personaje, por el año de 1590 dispuso la fundación de una villa en el valle de Carranque, que sirviera de enlace entre la ciudad de Quito y las poblaciones del sur del Virreinato de Santa Fe o Bogotá.
Para 1605, Gaspar de Zúñiga y Acevedo, Conde de Monterrey y Virrey del Perú, a petición del presidente de la Real Audiencia de Quito don Miguel de Ibarra, dictó las providencias respectivas para que se realice dicha fundación.
El 27 de septiembre de 1606 llega al valle de Carranque el Capitán Troya, hospedándose en el convento de los Dominicos.
Solicita la comparecencia del Corregidor Don Diego López de Zúñiga del distrito de Otavalo; le hace conocer de su nombramiento y propósito, posicionándose ante el Notario Don Pedro Carvallo.
Al siguiente día, investido de su Autoridad, en medio de una numerosa comitiva de militares, frailes y civiles, recorrieron el extenso terreno del valle circundado por el río grande (Tahuando) y el menor (Ajavi), verificando el cuadrilátero de 9 cuadras.
Posteriormente se detienen en una parte de las estancias de Antonio Cordero y Juana Atahualpa, (actual sector del parque Pedro Moncayo) donde se habla sembrado un grueso madero, a manera de una horca, símbolo de la autoridad y la justicia.
Cristóbal de Troya funda la ciudad de Ibarra un 28 de septiembre de 1606
Fue así como el 28 de septiembre de 1606, en tierras de Caranqui, Cristóbal de Troya fundó la ciudad de Ibarra.
Además del Corregimiento del mismo nombre que “se extendía desde el puente de Rumichaca” por el norte; por el occidente “hasta el pueblo de Otavalo”, exclusive; por el sur oriente “hasta la laguna de Cochicaranqui”, y por el nor-occidente hasta los pueblos de Lita, Quilca y Cahuasquí.
Estuvieron presentes en dicho acto importantes personalidades militares y religiosas de la colonia, como fray Pedro Bedón, Gaspar de Torres, Juan del Barrio Sepúlveda y el escribano Pedro Carbayo.
Se escogió este día para su fundación, por ser el del cumpleaños del presidente de la Real Audiencia.
Se determinó que la nueva población se llamará San Miguel de Ibarra, para perpetuar de esa manera el recuerdo de su fundador.
El valle era rico en manantiales, en bosques y tierras, albergaba una densa población laboriosa de indígenas y 200 españoles habían establecido estancias en el lugar y vivían de asiento con sus familias.
Para su atención espiritual los Padres Agustinos habían establecido un convento en el Olivo.
Por la amabilidad de su gente, la habilidad de sus artesanos, la belleza de sus paisajes y las bondades de su clima, la ciudad de Ibarra se ha convertido en uno de los principales centros de atracción turística del Ecuador.