El tamaño real de todos los países del mundo
El tamaño real de todos los países del mundo. A Gerard Kremer —más conocido como Gerardus Mercator— le gustaban la astronomía, las matemáticas y, sobre todo, los mapas. El problema es que algo no le cuadraba en los que los cartógrafos hacían en aquel momento. En 1569 lanzó su particular sistema para representar el mundo y acabó pasando a la historia por su proyección Mercator, que hoy se usa en buena parte de los mapas del mundo que vemos. Si tienes alguna inquietud recuerda contactarnos a través de nuestras redes sociales, o regístrate y déjanos un comentario en esta página. También puedes participar en el WhatsApp. Si usas Telegram ingresa al siguiente enlace.
Esa forma de representar el mundo era ingeniosa, pero no perfecta. Mercator buscaba sobre todo crear una herramienta útil para los marineros del mundo: la representación de continentes y países era fantástica para navegar el mundo, pero tenía un problema: los tamaños de esos continentes y países estaba distorsionada. Ahora hay quien quiere que la proyección Mercator desaparezca del mapa (guiño).
Groenlandia no es para tanto
Hace tiempo que han aparecido mapas como el de Engaging Data en los que se puede ver el tamaño real de los países respecto a su proyección Mercator. Esa proyección provoca que muchos países parezcan mucho mayores de lo que en realidad son: Canadá, Estados Unidos y Rusia son mucho más pequeños de lo que parecen en los mapamundi tradicionales, y lo mismo pasa con los países nórdicos.
El hemisferio norte se vuelve de repente mucho más pequeño, y Groenlandia, que es ciertamente grande, no es ni mucho menos tan grande como el continente africano, que es lo que parece en los mapas que hacen uso de la proyección Mercator.
En The True Size también podemos entender mejor cuál es el tamaño real de un país sobre un mapa que usa la proyección Mercator. Una vez buscamos un país, este aparece proyectado, pero a partir de ahí podemos «arrastrarlo» a otra zona del mapa para ver cómo al hacerlo su tamaño va reduciéndose de forma notable en casos como los comentados.
Así, cogiendo el ejemplo extremo de Groenlandia y eligiendo también España, es posible ver cómo en realidad su superficie (2,166 millones de km2) es efectivamente unas cuatro veces la de España (505.944 km2).
No hay mapas perfectos, pero ha habido otros intentos de que nuestra percepción del mundo cambie. Ahí es donde entra la llamada proyección de Gall-Peters, que trata de corregir esas distorsiones y mostrar así una imagen más precisa del mundo.
Esa proyección para la representación de nuestro mundo fue descrita por primera vez en 1855 por James Gall, mientras que Arno Peters hizo que dicha idea llegara a un público ma´s amplio en la década de los 1970 a través del llamado «Mapa Mundial de Peters» que usaba dicha proyección.
Dicho sistema ha intentado ir popularizándose: en 2017 los colegios públicos de Boston comenzaron a usarlos, pero también se ha usado de forma frecuente en el sistema escolar de Gran Bretaña y es el que la UNESCO (United Nations Educational and Scientific Cultural Organization) apoya por esa capacidad de comunicar visualmente los tamaños relativos de las regiones de nuestro planeta.
Aún así los mapas del mundo siguen dominando por la proyección Mercator, y eso se nota especialmente en esa forma que tenemos de ver los mapas en la actualidad: servicios como Google Maps, Bing Maps, MapQuest u OpenStreetMaps hacen uso de una ligera variante de esta proyección llamada Web Mercator que es la más práctica para poder «navegar» por el mundo.
Todo apunta por tanto a que seguiremos usando esa proyección Mercator en los mapas de forma predominante. Es probablemente una buena solución a nivel práctico, pero ya sabéis: esos mapas engañan (un poco).