¿Cuál es el objetivo de la misión Mis Mejores Años?

Es el programa de mayor sensibilidad del Gobierno y tiene un componente importante que es el cuidado. Está destinado a mejorar la calidad de vida de los adultos mayores en condiciones de pobreza extrema.

En Ecuador la sociedad está en pleno envejecimiento, el 7% de los ecuatorianos tiene más de 65 años, este año tenemos 1’221.000.

¿Cuántos se han beneficiado?

No todos los adultos mayores tuvieron la capacidad de tener un empleo formal o afiliarse al Seguro. Tenemos pensiones no contributivas para 293.614. En el caso de ellos prácticamente estamos cubriendo al 55% de la población de 65 años del quintil uno, es decir a los más pobres entre los pobres. Reciben 50 dólares. Con Mis Mejores Años beneficiamos a 100.720. En todas las modalidades el Ministerio atiende a 462.185 personas.

¿Cuál es la situación actual de las personas del grupo etario?

Ecuador está sentado sobre una generación que se dedicó solo a trabajar. Solo dos de cada diez adultos mayores terminaron el bachillerato.

En esas condiciones su reserva patrimonial no es enorme y por ello necesitan de pensiones contributivas, no contributivas y del cuidado. Además la reserva funcional, es decir la capacidad de autonomía está severamente afectada por enfermedades (discapacidad, demencia, alzheimer o patologías crónicas).

¿Manejan otras problemáticas?

Cuando trabajé en los servicios de cuidado y protección especial para víctimas de violencia, el 30% de los casos eran adultos mayores. Eso quiere decir que están sometidos a una carga enorme de violencia.

Uno de los principales problemas que tienen los viejitos es la desnutrición, el difícil acceso a las medicinas y al cuidado residencial.

Cuando lleguemos a 2050 el 14% de la población será adulto mayor. El país tendrá que prepararse mucho para trabajar con ellos.

Con Mis Mejores Años buscamos profesionalización, reserva funcional, protección patrimonial y una estructura normativa para proteger sus derechos y excepciones tributarias vigentes que podrían mejorar.

¿Cuál es el aporte de la Ley del Adulto Mayor aprobada?

Apoyamos en la Asamblea la discusión de la Ley. Es una norma que debe ser resuelta, porque tiene una objeción del Ejecutivo, en 2014 fue presentada por la Defensoría del Pueblo.

La Ley se aprobó pero en la realidad solo el Presidente puede establecer tributos. Y esa ley venía con un contenido de reformas tributarias. Se busca el mecanismo para hacer una eventual presentación de una reforma tributaria específica relacionada con el adulto mayor. En eso está trabajando la Asamblea con el Ejecutivo.

¿El MIES contempla la creación de centros gerontológicos?

Sí. Empezaremos a construir uno en Archidona, antes de finalizar el año. Tendrá una capacidad para 50 adultos mayores. Atendemos 1.183 centros para 78.933 personas en modalidades: diurna, residencial con administración directa y en convenios con cooperación.

¿Cuál es la inversión en los adultos mayores?

En total la inversión en 2018 asciende a $ 314’983. Tenemos el grupo que recibe servicios, otros son los de pensiones y a ellos se suma el programa Mis Mejores Años. Vamos a atender a 30.000 nuevos casos, de los cuales buscamos que el 60,4% sea rural, eso se busca con la revisión del registro social, que no se actualizaba desde 2013, los beneficiarios actuales son del área urbana (56%).

¿Hay reducción de pobreza?

Sí, en 2007 era 34,3% en 2017 llegamos al 17,6%. Mientras que los de pobreza extrema están en 4,8% y en analfabetismo 26,5%.

¿Qué cambió en la atención?

Hemos hecho algunas transiciones. En primer lugar buscamos vincular al que recibe la transferencia monetaria ($ 100) a Mis Mejores Años y vincularlo con los cuidados, de lo contrario no es bueno.

Además se incrementó el bono Mis Mejores Años para este grupo y hay una mejor focalización de los pobres. Antes teníamos cuidadores bachilleres, ahora trabajaremos con cuidadores auxiliares gerontológicos como parte de este cambio de concepto, buscamos especialidad en atención.

Todos los servicios que presta el MIES tienen una formación continua virtual. Lo creamos este año. (I)